Amancio Ortega inyectó 4.500 millones en la filial de EE UU de Pontegadea

A principios de año, en una de sus contadas apariciones públicas, Roberto Cibeira, consejero delegado de Pontegadea, el vehículo inversor de Amancio Ortega, no descartó realizar alguna compra en España si los precios bajaban, pero, sobre todo, reconoció que el principal país para futuras adquisiciones seguirá siendo Estados Unidos, donde aseguró haber cerrado transacciones con descuentos de hasta el 30% en algunos activos respecto al precio inicial marcado por el vendedor.

Las cuentas correspondientes a 2022 que acaba de depositar la compañía en el Registro Mercantil de A Coruña confirman sus palabras. Bajo el paraguas de Pontegadea hay diferentes sociedades que le sirven al fundador de Inditex para invertir su fortuna. Una de ellas es Pontegadea Inmobiliaria, que aglutina sus negocios en el mercado del ladrillo. De esa sociedad cuelgan una decena de filiales, que, en su mayor parte, corresponden con los países en donde invierte. Los inmuebles españoles están en Pontegadea España y el resto se reparte entre Pontegadea México, Pontegadea Francia, Prima Cinque (Italia), Pontegadea Canadá, Pontegadea Korea o Ponte Gadea USA, entre otras. Esta última es la que más inversiones ha recibido de la cabecera del grupo: 4.559 millones de los 8.907 totales, que recoge el informe de gestión de la compañía. Más de un tercio, 1.282 se transmitieron el año pasado, cuando el fundador de Inditex invirtió 1.700 en tres operaciones en suelo estadounidense.

La primera fue un rascacielos de apartamentos de lujo en Manhattan (Nueva York) por 500 millones. Fue su primera inversión de consideración en el sector residencial, ya que su actividad inmobiliaria se centra, sobre todo, en edificios de oficinas que ya están alquiladas. Era, hasta ese momento, el mayor gasto que el grupo había realizado en Estados Unidos.

La gran compra del año pasado llegó en julio, cuando Pontegadea cerró la mayor adquisición de su historia al abonar 900 millones por siete grandes centros logísticos en seis estados diferentes de EEUU. Y poco antes de las pasadas Navidades se anunció que Amancio Ortega sumaba a su cartera de inmuebles la torre Kiara, un rascacielos de 40 plantas y 461 apartamentos de lujo en Seattle. Era su segunda gran operación en el terreno residencial tras el inmueble de Manhattan.