Gefco, el principal proveedor de servicios logísticos e histórica filial de PSA (hoy Stellantis), ha iniciado una carrera contra reloj para cortar los vínculos con la compañía estatal rusa de ferrocarriles, RZD, propietaria del 75% de sus acciones desde 2012, y en la lista negra de empresas sancionadas por Estados Unidos desde que arrancó la invasión de Ucrania por sus vínculos con Putin. Según medios franceses, en la terna de interesados por entrar en Gefco estaría la naviera gala CMA-CGM, el grupo también francés de logística del motor CAT -proveedor histórico de Renault-Nissan- y varios fondos de inversión, como Anchorage y DK. La industria francesa es la principal empleadora extranjera en Rusia y la presión internacional ha empujado a muchas de ellas, incluida Renault, a detener sus operaciones para aislar todo lo posible al Kremlin.
Russian Railway Company (Rossiïskié Zheleznié Dorogi, RZD) irrumpió en Gefco en 2012, en un momento de crisis de liquidez de PSA, por 800 millones. El fabricante de automóviles francés conserva todavía el 25% del capital, aunque es público que ha intentado desprenderse de ese paquete en numerosas ocasiones, sobre todo tras la llegada de Carlos Tavares. Ahora lo que corre prisa es encontrar un comprador para el 75% de RZD. La compañía rusa lleva siendo objeto de sanciones internacionales desde la anexión de Crimea en 2014, aunque ha sido ahora con la invasión rusa de Ucrania cuando la situación se ha vuelto insostenible. El director general de Gefco, Oleg Belozerov, también está en la lista de empresarios sancionados por EE UU. En ese proceso de búsqueda participaría incluso el Estado francés, según recogen rotativos como Les Echos y Le Monde, que hablan de crisis “sin precedentes” en la compañía de transportes.
Renovación del contrato con Stellantis
La complejidad de la operación es todavía mayor si se tiene en cuenta que el contrato entre Gefco y Stellantis estaría a punto de expirar. De hecho, como avanzó FARO, Stellantis lanzó el año pasado un tender -proceso de selección- a nivel internacional para sus servicios logísticos una vez completada la fusión entre PSA y Fiat Chrysler Automobiles. En Vigo, Gefco es de largo el principal cliente del Puerto vigués y gracias a los volúmenes de carga que aporta, tanto de la planta de Stellantis en Balaídos como de otros puntos de origen como puede ser Kénitra, en Marruecos, sostiene buena parte de la autopista del mar, con sus dos enlaces, a Nantes-Saint Nazaire (Francia), que está subvencionado por España y Francia, y Tánger (sin ayudas). La naviera adjudicataria del servicio, Flota Suardiaz, llegó a un acuerdo con Gefco para utilizar sus buques para esas líneas regulares, pero de los flujos que aporta Stellantis a través de Gefco viven otras compañías marítimas como UECC, Neptune, K-Line, N.Y.K., Mitsui, Höegh Autoliners, Glovis o Wallenius Wilhelsem.
Primer cliente del Puerto
Más del 90% del tráfico Roll On-Roll Off que se mueve a través de la terminal de Bouzas lleva el sello Gefco-Stellantis, por lo que resulta evidente la importancia que tienen para el sector marítimo-portuario todas las decisiones que puedan afectar a Gefco.
