Stellantis vuelve a parar mañana martes por los microchips, algo que afectará a las dos líneas de producción. No se atisba un final a esta crisis mundial, y la industria viguesa del automóvil sigue pagando los platos.

La noticia llegó esta misma tarde desde la planta de Stellantis (antes Grupo PSA) en Balaídos, que informó esta tarde al comité y a los trabajadores que no habrá actividad mañana en los dos sistemas por problemas en el suministro de componentes que llevan integrados los ya famosos semiconductores.

La enésima parada de producción por los chips obligará a echar mano del ERTE aprobado por una mayoría sindical del comité de empresa hasta finales de año.

Con la parada de Stellantis, al menos media docena de fabricantes de componentes del área también detendrán su actividad, como es habitual.