La Comisión Europea acaba de publicar su evaluación Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC)de España con la conclusión de que se atajan en gran medida todas las deficiencias identificadas por las autoridades comunitarias en el borrador anterior, pero también ve margen de mejora en renovables, eficiencia energética, investigación e innovación, cooperación regional, subsidios y transición justa. En el capítulo de descarbonización e impulso de las renovables, por ejemplo, el informe destaca que el plan definitivo es "más sólido y detallado" que el borrador, así como que se han fijado metas intermedias generales para 2022 y 2027, pero no incluye objetivos específicos para cada sector económico.
Con respecto a eficiencia energética, Bruselas considera que España plantea medidas que garantizarán el cumplimiento del objetivo de ahorro energético, pero echa en falta más detalles en relación al impacto que tendrán estas acciones sobre el consumo, así como información detallada sobre dichas iniciativas. El Ejecutivo comunitario subraya que el PNIEC español identifica correctamente los objetivos en Investigación y Desarrollo, pero "sin un calendario específico ni objetivos cuantificables". Además, el plan incluye medidas de apoyo para una parte "importante" de los objetivos establecidos, pero "todavía no queda aclarado el calendario o los mecanismos de financiación de muchos de ellos".
La ministra para la Transición Ecológica valora que la evaluación "en todos los campos es muy positiva". En unas declaraciones facilitadas por su departamento, Teresa Ribera considera que la opinión de la CE pone de manifiesto que los objetivos de España en todos los campos son "sumamente ambiciosos".
