La compañía Qatar Petroleum (QP), controlada por la administración catarí -su consejero delegado, Saad Sherida Al-Kaabi, es el ministro de Energía del país-, ha anunciado que pretende construir 60 nuevos buques gaseros. Y, aunque no ha revelado su importe económico, sí que prevé asignar el macropedido al naval surcoreano. En la terna figuran como favoritos, según el diario Korean Times, los llamados Big Three de la industria local (y global); Hyundai Heavy Industries (HHI), Samsung Heavy Industries (SHI) y Daewoo Shipbuilding & Marine Engineering (DSME). El primero ya ha avanzado en la absorción de Daewoo, también con dinero público surcoreano. Ambos astilleros suman ya una cartera de pedidos de 180 unidades, a sumar a otros 154 buques asignados a las filiales Hyundai Samho y Hyundai Mipo.

Según un informe de la consultora especializada Affinity, la firma resultante de la integración cuenta, solo en el segmento de gaseros, con una cuota de mercado global del 60%; entre ambas empresas entregaron 23 barcos de este tipo el año pasado. La patronal europea del sector (Sea Europe) ha condenado las ayudas públicas concedidas sistemáticamente por Gobiernos asiáticos a sus astilleros."Los bancos públicos surcoreanos continúan financiando proyectos a pérdida mientras el Gobierno ha empezado a poner en marcha" un proyecto para construir 200 megabuques de carga "pese a que lamenta la asociación -a la que pertenece Aclunaga- existe una sobrecapacidad en el mercado".