La compañía de barcos de apoyo al sector petrolero y gasístico Bourbon ha impulsado la creación del primer buque autónomo para este nicho de negocio. Junto a Automated Ships Ltd (ASL) ha firmado un memorándum de entendimiento (MOU, por sus siglas en inglés) para llevar a cabo el denominado proyecto Hrönn en colaboración con la firma Kongsberg.

La multinacional, que eligió Vigo para dar cobijo a sus buques el pasado año y que todavía mantiene a uno aquí, espera encontrar las ayudas suficientes para financiar la construcción efectiva del prototipo.

El barco será un barco para la industria offshore, en la que Bourbon pretende incluir además del sector de la energía a otros como la acuicultura o la ciencia. Además, también serviría en caso de emergencia (como por ejemplo un incendio) trabajando de forma cooperativa con barcos tripulados.

ASL lleva trabajando en el diseño desde noviembre el año pasado. Se basa en un buque monocasco de acero, para proporcionar más capacidad de carga útil y una mayor flexibilidad en la amplia gama de operaciones.

Las pruebas de campo del proyecto Hrönn se llevarán a cabo en una zona de pruebas oficialmente designada para buques autónomos en el fiordo de Trondheim, bajo los estándares de DNV GL y la Autoridad Marítima Noruega (NMA).