O Foxo celebra el Día del Árbol

El alumnado participó en la plantación de medio centenar de especies autóctonas

Riego de árboles recién plantados con una motobomba forestal.

Riego de árboles recién plantados con una motobomba forestal. / nerea couceiro

Ayer se celebraba el Día del Árbol. Una jornada pensada para recordar la importancia de cuidar la zonas arboladas, que suponen el pulmón del mundo. Desde el CEIP de O Foxo de A Estrada, en colaboración con la Xunta de Galicia, quisieron concienciar a su joven alumnado sobre esta cuestión, llevando a cabo un acto en el que participaron cerca de 40 niños y niñas.

El alumnado asiste a la liberación de un ave milano.

El alumnado asiste a la liberación de un ave milano. / nerea couceiro

En concreto, los jóvenes, acompañados de sus profesores, llevaron a cabo la plantación de casi medio centenar de árboles autóctonas de la mano de un equipo de agentes forestales que también aprovecharon para explicarles la importancia de cuidar el medio ambiente.

Además, el alumnado asistió a la liberación de una ave “milano” que concluyó su estancia en el Centro de Recuperación de Fauna. La emoción por ver al pájaro estirar sus alas y emprender rumbo al cielo podía verse reflejada en los rostros de los alumnos y alumnas del centro, que tuvieron la oportunidad de observarlo de cerca antes de su liberación, mientras uno de los agentes forestales lo sostenía para evitar contratiempos.

Si bien los benjamines eran los protagonistas absolutos de la jornada, en el evento también estuvieron presentes diversas personalidades políticas. Entre ellas, el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Agustín Reguera, participó dicha actividad llevada a cabo por la Xunta en el CEIP O Foxo.

En este sentido, el delegado territorial destacó la importancia de este tipo de actividades que “rompen la rutina de los más pequeños y les enseñan a respetar y cuidar la naturaleza de una forma divertida”. De hecho, la iniciativa demostró ser un éxito y gozó de gran acogida entre los pequeños estudiantes, que experimentaron en primera persona la importancia de la reforestación con especies autóctonas para mantener la salud de los montes y el ecosistema gallego.

Todo lo bueno termina, y al final de la mañana los jóvenes debían volver a las aulas. Pero antes, tras finalizar la plantación, los pequeños vieron en acción una motobomba que sirvió, además de para explicar el trabajo de los agentes durante los incendios forestales, para regar los árboles plantados.

El delegado territorial agradeció el interés y buen comportamiento de todo el alumnado y “muy especialmente a los agentes forestales y los docentes que siempre están dispuestos a trabajar con la Xunta en estas labores de concienciación que son tan importantes para garantizar el futuro de nuestro medio natural”.