Ignacio Maril: “Cuiña sigue sin aclarar los problemas de la obra del nuevo concello”

El portavoz del PP lamenta que el regidor se escude “en boicots y en el pasado” y eluda aclarar por qué se colocó una cubierta más pesada | Seguirá con su labor de fiscalización

Ignacio Maril, flanqueado por sus compañeros, el lunes, en la sede del PP de Lalín. |   // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

Ignacio Maril, flanqueado por sus compañeros, el lunes, en la sede del PP de Lalín. | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN / Salomé Soutelo

Salomé Soutelo

Al PP de Silleda poco o nada le ha aportado la respuesta del alcalde, Manuel Cuiña, sobre las “anomalías” de la nueva casa consistorial, que celebra una jornada de puertas abiertas este sábado. “El regidor habló de todo, de boicots, de conspiraciones, de cazas de brujas, de las actitudes de los grupos municipales, pero no dijo ni una sola palabra, ni dio una sola explicación sobre las irregularidades con las que el nuevo consistorio afronta su apresurado acto de inauguración”, valora el portavoz de los populares, Ignacio Maril.

A la espera del pleno

El líder del PP recuerda que esa inauguración va a tener lugar sin el certificado de fin de obra, “una cuestión que no está permitida”, y que el PSOE sigue sin dar aclarar “los probables problemas de peso de la cubierta, que se cambió por una más barata pero de mayor tonelaje a través de un proyecto modificado”. Para Maril, “es lamentable que el alcalde se esconda detrás de acusaciones y críticas a la legítima acción de fiscalización que ejercemos como oposición” y le acusa de mantener una actitud soberbia en lugar de, en un ejercicio de transparencia, convocar el pleno extraordinario que solicitó el PP este lunes para que explique la ejecución y los modificados de proyecto del nuevo consistorio.

Sobre la afirmación de Cuiña de que el Partido Popular raya actitudes dictatoriales, su máximo responsable local replica que el munícipe “maneja el Concello como si fuese su cortijo, y nos tilda de antidemocráticos mientras nos reprocha nuestro derecho a convocar plenos extraordinarios, escudándose en una cuantía global que no es ni la mitad de lo que a él no le parecía nada cuando se hablaba de su sueldo”.

Desde el grupo popular también le indican al ejecutivo socialista “que nunca nos cansaremos de fiscalizar la acción del gobierno, ni tampoco de supervisar las obras, por mucho que les moleste, algo normal ya que sus años de regidor siempre se caracterizaron por muchas trapalladas, por no hablar en otros términos”. Maril recuerda que esta acusación no es exclusiva del partido que encabeza, “porque el Bloque también expresó muchas veces sus dudas en esta materia”, apostilla.

Por último, Ignacio Maril recalca que “no es cierto que desde el PP estemos desgastando a Cuiña: tuvo la dudosa honra de no aceptar el puesto de alcalde de Silleda, con una dimisión caprichosa exclusivamente por dinero, y después rectificó ante el ridículo espantoso que estaba haciendo”.