Los feriantes mantienen su pulso con el Concello y rechazan su oferta de rebaja de tarifas para As Dores

El gobierno volverá a sacar a concurso los puestos con unos precios mucho más bajos y sin repercutirle el coste de la empresa de seguridad | “Antes nos subían el 300 por ciento y ahora aún es el doble”, afirma su portavoz

“Antes nos subían el 300 por ciento y ahora aún es el doble en comparación con el año pasado. Todavía es muy caro y la gente está enfadada”. Así resume el presidente de la Unión de Industriales Feriantes de España (UIFE), Ángel Gutiérrez, la reunión de ayer en el consistorio de Lalín para asegurar la presencia de barracas y atracciones en las próximas fiestas patronales.

El gobierno, que había apelado al silencio y eludió hasta ahora valorar la críticas de los feriantes, emitió un comunicado en el que analiza lo que considera los ejes fundamentales del encuentro entre el edil de Festas, José Cuñarro, un representante de la UIFE y otra de un colectivo autonómico. La oferta del gobierno pasa porque las arcas municipales asuman en solitario el coste de la contratación de una empresa de seguridad que verifique los puestos –su coste es de 18.000 euros– o lanzar de inmediato un nuevo pliego con tarifas más asequibles Pero para el gobierno existe una línea roja y insiste en que “en ningún momento se va a permitir rebajar los estándares de control de seguridad de las atracciones o la contratación de ningún gabinete que suponga un nivel de control inferior”. Algo que los feriantes, asegura, entendieron de “buen grado” y entendieron como positivo que se retirara inicialmente esa carga.

Además, José Cuñarro y los representantes de los empresarios del ocio acordaron la posibilidad de revisión de cinco de las atracciones que por el coeficiente que se les aplicó podían tener un incremento más importante, en el que los técnicos ya valoraron un cambio del coeficiente aplicable. Después del intercambio de posturas, el edil le comunicó a los feriantes que a la mayor brevedad posible se licitará de nuevo la posibilidad de alcanzar puestos con el precio reducido sin incorporar los gastos de control de seguridad de las atracciones, asumiéndola el ayuntamiento, y los representantes anunciaron que la pondrían en común con el resto de los socios de los colectivos para conocer su disposición a la participar en el nuevo concurso, con tarifas más asequibles. Asimismo, el concejal indicó que la actualización de precios se debe a las dimensiones de las parcelas, que en la mayoría de los casos eran muy inferiores a las reales, en la que se contempló la incorporación de los estudios de seguridad de las atracciones que ahora son obligatorios por el cambio normativo y en la que se recoge los precios de la instalación y de la corriente eléctrica para los puestos de menos de 5KW. Una regularización al alza que se produjo, remarcó, después de muchos años sin revisar los precios.

Negociar

Una vez rematada la reunión, el representante de la UIFE Jorge Fariña trasladó las novedades a esta asociación. Su máximo dirigente entiende que todavía no se dan las condiciones para garantizar la participación de las atracciones en As Dores porque los precios continúan siendo muy elevados. “¿Qué se piensan que es Lalín?”, sentencia Ángel Gutiérrez. El presidente, propietario de una atracción de colchonetas, explica que el año pasado su montaje le suponía unos 360 euros, que con las tarifas aprobadas la semana pasada se iba hasta los 1.300 y con la rebaja anunciada en la reunión de ayer se queda en torno a 732 euros. Valora el gesto del ayuntamiento de revisar el precio de las atracciones que más espacio precisan por sus características, pero insiste en que estos costes son todavía muy elevados para unos festejos de la dimensión de los lalinenses.

“Lo hicieron mal, no quisieron reconocerlo, y ahora no dan el brazo a torcer porque dicen que se estarían bajando los pantalones con nosotros, pero eso no es así; estamos hablando de negociar”, afirma, al tiempo que echa en falta unas conversaciones previas entre las partes para acordar un alza de precios que en todo caso sería mucho más moderada, de en torno al 15 por ciento. Cree que ahora el Concello les dará dos días para presentarse al nuevo concurso público.

Una década sin revisar los precios

El gobierno municipal, a través de su concejal José Cuñarro, incidía ayer en una cuestión, que no es otra que la regularización de precios acumula más de una década; es decir, entiende que es preciso ajustar la tasación de la ocupación del espacio público. Con la seguridad como argumento indiscutible, el responsable del departamento de Festas entiende que es de justicia “que cada feriante se haga cargo de los metros reales de espacio que ocupa, ya que las atracciones y los puestos se fueron incrementando y, por supuesto, que cada atracción y puesto se haga cargo de la energía eléctrica que consume”.

En su encuentro con los representante de los empresarios del ocio, Cuñarro analizó uno por uno los precio de las barracas y puestos, “justificando los incrementos de precios en la mayor parte vinculados a la regularización del espacio que en numerosos casos se incrementaba, y al ajuste del precio motivado por el cobro de la energía eléctrica que consumían y que hasta ahora no venían abonando”. Desde el ejecutivo lalinense se apuntaba además que las explicaciones relativas al incremento de las tarifas fueron justificadas por parte de los técnicos municipales que participaron tanto en la memoria previa de la regularización de la tasa con el la licitación de la orden referida a la ocupación del suelo público en la urbanización de O Regueiriño.