1.200 votos en busca de dueño

Los lalinenses podrán elegir el próximo día 28 entre cuatro partidos a quien confiar su voto y que el dictamen de las urnas decida quién ostentará la responsabilidad de regir el consistorio durante cuatro años. La oferta de papeletas se reduce a la mitad respecto a 2019, cuando habían sido ocho las formaciones concurrentes. La Plataforma Aberta Cidadá (PAC), Coalición de Centro Democrático (CCD), Partido Anticorrupción y Justicia (PAyJ) y Ciudadanos recibieron entonces exactamente 1.238 votos, que ahora deberían repartirse PP. Compromiso por Lalín, PSOE y BNG.

Pocas ciencias son exactas y la política desde luego no entra en este grupo, aunque estamos hablando de un relevante número de votos que ahora buscarían dueño y buena parte de ellos deberían –la política es a veces caprichosa– ir a manos de partidos de derechas si tenemos en cuenta el concepto ideológico de tres de cuatro de estas fuerzas que ahora no entran en el tablero electoral. La CCD cosechó entonces 273 votos y tanto PAyJ como Ciudadanos se quedaron en 254. Tampoco logró representación en el salón de plenos la Plataforma Aberta Cidadá de Lara Rodríguez Peña en su segunda cita con las urnas al reunir solo el 3,57 por ciento de los sufragios emitidos. En 2015 había obtenido 770 papeletas, adelantando incluso al BNG y Peña tomó posesión y acabó formando parte del gobierno presidido por Rafael Cuíña.

Parece improbable que quien confió en CCD, PayJ o Ciudadanos decida ahora entregarlo a organizaciones progresistas, pero afortunadamente el voto es secreto y el resultado solo se conocerá última hora de la tarde del día 28. Porque, sin ir más lejos, el PP de José Crespo recuperó la mayoría absoluta con un porcentaje de voto menor que el que había tenido en 2015, aunque con 192 papeletas más. Sean cuatro, ocho o diez las candidaturas y, a pesar de las estrategias y las cábalas que se realicen con el método D’Hondt, lo irrefutable es que la tarta electoral es una y debe ser repartida entre un número determinado de partidos.

Reducción del censo

Si en 2019 esta tarta estaba compuesta por 16.467 posibles votantes, ahora el censo ha adelgazado hasta los 16.108. En las últimas municipales ejerció su derecho el 78,45 por ciento del electorado, hubo 78 papeletas en blanco y 131 declaradas nulas, que son muchas. Son demasiadas, porque en 2019 el BNG se quedó a 94 de lograr el segundo concejal y, en consecuencia, que el PP perdiese la mayoría y lo mismo le aconteció a los populares cuatro años antes, cuando 211 votos lo apartaron del poder. Y, ¿qué aconteció con Compromiso y PSOE? Rafael Cuíña cedió el 4,92% de los votos respecto a 2015 y los socialistas incrementaron sus apoyos un 4,2 por ciento. El BNG subió casi dos puntos y PAC bajó casi tres. Pero la política sorprende y no es una ciencia exacta.

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