“Intentamos minimizar al máximo el impacto de la enfermedad en los pacientes”

María Dolores Arenas es una nefróloga granadina que llega a la Fundación Renal Íñigo Álvarez de Toledo procedente del Hospital del Mar de Barcelona. Se licenció en Medicina en 1997, en la Universidad de Alicante, y se especializó en nefrología en la misma ciudad. A lo largo de su trayectoria profesional ha conocido tanto el sector público como el privado. Es la directora asistencial de la fundación y autora del libro “Renata mi nefróloga”, dirigido a la población infantil para fomentar la prevención de la enfermedad renal. El martes la catedrática Blanca Roig presentará en Lalín su edición en gallego.

–¿Su libro está cumpliendo con la idea para la que se escribió?

–Pues, sí. La idea es un poco intentar visibilizar la enfermedad renal y que la gente la conozca para que la gente la pueda prevenir. Está dirigido a niños de primaria, para que puedan ser utilizados como material didáctico escolar y que formen parte de los libros recomendados para lectura en las escuelas, con el fin de ofrecer visibilidad a la existencia de la enfermedad renal, los diferentes modelos de tratamiento renal sustitutivo y concienciar desde la infancia en las estrategias de prevención y, también, en la donación de órganos.

–¿Cómo valora el trabajo que se está haciendo en Teixedal?

–Es un centro que en estos momentos tiene 30 pacientes en total y donde atendemos a toda la comarca de Deza. Se creó precisamente para acercar la diálisis a esa población. Se trata de un centro pequeño, que no crece, pero creemos que realiza la función que tiene que hacer para que los pacientes no tengan que desplazarse, por ejemplo, hasta Santiago. Yo creo que el área sanitaria sufre la suficiente carga como para que además le añadamos lo que es el transporte y el hacer los trayectos largos. Además, aquí en Galicia con el mal tiempo que hace a veces, intentamos minimizar al máximo el impacto de los pacientes afectados por la enfermedad renal.

–¿Se mantiene el número de pacientes en el centro de Lalín?

–Sí, porque desde que empezamos estamos trabajando con entre 30 y 33 enfermos. La verdad es que desde el principio ni hemos subido ni hemos bajado tampoco el número de personas. Estamos en una cifra estable de pacientes. Si te soy sincera, esperábamos una cifra mayor. Nosotros somos una fundación, una organización sin ánimo de lucro, y entendemos que nuestro propósito va más allá. Personalmente, pienso que se podrían beneficiar más pacientes de Teixedal porque es un centro que pertenece al área de Santiago, pero tiene una ubicación que coge parte del área de Ourense e incluso está cerca de pueblos vinculados a Lugo. No sé si algunos pacientes que pudieran venir de esas zonas, pero que son poblaciones que están más cerca de Lalín, se podrían beneficiar de los servicios que ofrecemos.

–¿A qué le achaca que no haya pacientes de esos lugares?

–Sin duda, es un tema de organización de áreas sanitarias. En teoría, el hospital que nos deriva a nosotros pacientes es el de Santiago. El de Ourense los deriva a O Barco, Verín o dentro de la propia ciudad. Eso creo que es un tema que se podría trabajar en un futuro e intentar no ser tan cuadriculado en ceñirse al área sanitaria, sino más bien siguiendo criterios de proximidad y de facilidad para desplazamientos. Si las tres áreas sanitarias mandaran pacientes a Lalín, pues nuestro centro, que además está dimensionado para muchos más pacientes, podría acogerlos de manera inmediata y ampliar los turnos habituales.

–¿Atiende a niños?

–En Lalín son todos adultos porque estamos hablando de una zona con una población muy envejecida. De hecho, la enfermedad renal, aunque afecta a todas las edades, está más extendida en personas mayores. En concreto, en Galicia, casi todos son personas mayores. Con más motivo, no queremos que tengan que desplazarse de manera innecesaria.

–¿Tiene previsto seguir con su vocación literaria y divulgativa?

–Sí, claro. Este es el primer libro de una serie futura, que también estamos viendo cómo está funcionando y lo hemos traducido al gallego y, también, al catalán. Lo estamos llevando a través de las escuelas de enfermería escolar, de los colegios, o del Departament d’Educació de la Generalitat, y le buscamos diferentes métodos para poder distribuirlo. Este sería el primer libro pues de una serie en la que iremos profundizando cada vez más en lo que es la enfermedad renal como tal y su manera de prevenirla.

Jornada de prevención de la enfermedad renal en el centro de diálisis de la capital dezana

Enmarcado dentro de los actos del Día Mundial del Riñón, que se celebra este mes de marzo, la Fundación Renal organiza el martes día 28, en su centro de diálisis Teixedal de Lalín (Rúa da Ponte, 93), una jornada para dar a conocer la enfermedad renal, sensibilizar sobre la elevada tasa de crecimiento que está desarrollando en los últimos años, y fomentar su prevención entre la población de la comarca de Deza. En el programa se llevarán a cabo diversas actividades dirigidas a niños, jóvenes y a la población en general. Está previsto que unos 150 alumnos del CEIP Xesús Golmar y del IES Ramón María Aller participen en los talleres (de 9.15 a 12.45 horas). Para los más pequeños se realizarán talleres de presentación de “Renata mi nefróloga”, un libro ilustrado dirigido a niños para fomentar la prevención de la enfermedad renal desde la infancia. En el caso de los jóvenes, se organizarán talleres para dar a conocer la enfermedad renal, sensibilizar sobre la importancia de la prevención y conocer de primera mano cómo se llevan a cabo los distintos tratamientos o la importancia de una atención integral que incluya, además de tratamiento médico, apoyo psicológico, social y nutricional. La jornada también contempla acciones dirigidas a la población en general. Se realizarán pruebas gratuitas de detección precoz (de 10.00 a 15.00 horas) en el propio centro. Así, todos aquellos que lo deseen podrán pasarse por el centro y, con un simple pinchazo en el dedo, podrán conocer un poco mejor su riesgo renal. También habrá una jornada de puertas abiertas para que los vecinos puedan conocer de primera mano (pases a las 13.00, 13.30, 14.00 y 14.30 horas) no sólo esta opción de tratamiento de la enfermedad renal, sino que los profesionales les podrán incluso informar de cuáles son los factores de riesgo, los consejos para prevenirla, o las diferentes opciones de tratamiento.

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