Los cuadros de Laxeiro se mudan al MARCO

Los vecinos y visitantes de Vigo amantes del arte contemporáneo gallego tienen desde hoy un nuevo punto de encuentro con la obra del lalinense universal José Otero Abeledo, Laxeiro. Si hasta ahora buena parte de su prolífica producción artística se puede contemplar en la Casa das Artes olívica, hoy se inaugura en el Museo de Arte Contemporánea de Vigo (Marco) la muestra denominada Laxeiro é a arte da súa época, comisariada por el director del centro Miguel Fernández-Cid, que esta mañana la presentará en compañía de regidor olívico Abel Caballero.

El Marco pretende culminar de esta forma el Año Laxeiro, que concluye el próximo mes de abril, ofreciendo una muestra de producción propia mediante un gesto a la trayectoria vital del artista lalinense fijando la inauguración un 23 de febrero y la clausura el 21 de julio, haciendo coincidir con los días de nacimiento y fallecimiento del autor dezano. Al término del acto de esta mañana tendrá lugar una visita guiada a las salas de la exposición en compañía del comisario y director del Marco junto a las autoridades presentes.

La exposición que supone la entrada del arte laxeiriano en el Marco formula una visión novedosa y una propuesta de debate poniendo el acento en el diálogo de la pintura del genio de Donramiro con la de otros creadores coetáneo, y que incide en la necesidad de estudiar a Laxeiro en el contexto del arte de su tiempo. Se trata de la primera vez que se podrán contemplar obras del artista de Donramiro junto a otras firmadas por autores que Laxeiro admiraba con curiosidad. Así, en el Marco también se podrán contemplar cuadros de Ignacio Zuloaga, Jesús Corredoyra, Arturo Souto, Manuel Colmeiro, Carlos Maside, Asorey, Maruja Mallo, Luis Seoane y Torres García, o que formulaban referencias para un rico diálogo visual, que agradecerá el espectador.

Desde la organización del evento se recuerda que, además, entre las “devociones” del creador de Lalín se encuentran Gutiérrez Solana, Vázquez Díaz, Benjamín Palencia o los más tardíos Antonio Saura, Rafael Canogar o Washington Barcala. Y como referencias especiales fuera del espacio temporal de Donramiro, e incluso para lo que es habitual contemplar en el recinto de la viguesa calle del Príncipe, se encuentran nombres como Rembrandt o Goya, que también estarán presentes con obra gráfica en esta exposición. Desde el Marco subrayan que “no se trata de una propuesta de cierre, sino de debate, con la que se incide en la necesidad de estudiar a Laxeiro en el contexto del arte de su época”.

Alonso Montero

En otro orden de cosas, mañana el presidente de la Fundación Laxeiro, Abel Caballero, hará entrega del Premio Laxeiro 2023 a Xesús Alonso Montero, un galardón que fue acordado por el patronato de la Fundación Laxeiro en la reunión anual ordinaria del pasado 30 de noviembre como “reconocimiento a su labor en los ámbitos de la lingüística, la creación literaria, la edición y la docencia, y su compromiso con la cultura gallega en general”, según indican desde la Fundación Laxeiro de Vigo. El acto se celebrará a las 12.30 horas en una de las salas de la exposición Laxeiro y el arte de su época, en el Marco, y la convocatoria es abierta hasta completar aforo en el recinto.

Sin abandonar la ciudad de Vigo, los dos eventos en torno a Laxeiro de esta semana prolongan la exposición que hasta el domingo pasado se pudo visionar en la Fundación Laxeiro. Se trata del interesante y ambicioso proyecto expositivo titulado Un poema para Laxeiro, de José María Barreiro y Antón Pulido. La actividad también se enmarca en el Año Laxeiro organizado por la Real Academia Gallega de Bellas Artes. Se trata de un diálogo plástico entre dos artistas consagrados que se acercan desde lo figurativo y lo abstracto a otro gran maestro de la pintura con la intención de rendirle un homenaje con un profundo mensaje a través del color.

Todas estas iniciativas bajan el telón a un año que empezó en el Museo Ramón María Aller de Lalín con Foi un home. Laxeiro en América (Buenos Aires, 1950-1970), exposición conmemorativa que inició en la tierra natal del artista un viaje que llevó a Madrid, Santiago y París la obra del que es considerado el gran pintor gallego del siglo XX.

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