Una nueva borrasca desboca los cauces de los ríos

Sigue cortada la vía de acceso a la playa fluvial de Vilatuxe

Salomé Soutelo

Salomé Soutelo

Comenzamos la semana con un anticiclón, que durará hoy y mañana. Pero las jornadas de Nochebuena y Navidad han dejado tras de sí aguaceros que, una vez, han vuelto a desbordar los ríos. En Lalín, entre el sábado y ayer domingo han caido 78 litros por metro cuadrado. En Forcarei, el concello más lluvioso de la zona, fueron 85,6.

La intensidad de las lluvias mantiene cortada desde este domingo la vía de acceso a la playa fluvial de Pozo do Boi, en Vilatuxe. El Deza ha inundado el área recreativa y también causó daños en la playa fluvial de A Carixa, en la parroquia cruceña de Merza. El río en que desemboca, el Ulla, ha ganado tanta agua que el pantano de Portodemouros está llegan casi al aliviadero. En 2014 sí se usó. No en vano, el otoño e invierno de 2013 está entre los tres más lluviosos de la última década. Los otros dos son el de 2019 y el de este 2022.

El Asneiro, que desemboca en el Deza, ha doblado una de las vallas de Ponte Muiños, en la carretera entre Mouriscade y Vilanova. El geógrafo Antonio Presas explica que al desbordarse el río, el cauce va socavando el margen, causando lo que se conoce como erosión fluvial por el rozamiento del auga, "que puede ocasionar daños considerables", señala. Emerxencias Lalín, que ayer hizo un recorrido por las zonas más vulnerables a las crecidas de los ríos, ya señalizó el puente.