La crisis internacional de los suministros y el encarecimiento de las materias primas están detrás del parón que experimentan en las últimas semanas las obras de construcción del Centro Integral de Saúde (CIS) de Lalín. “Algunos equipos se retrasan en el plazo de entrega e incrementan mucho sus costes, lo que obligó a parar temporalmente la ejecución de los trabajos, una vez rematada la estructura”, explica la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade. Construcciones Ramírez es la adjudicataria de la contrata por 8,7 millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses, de modo que debería estar rematada antes de terminar este año 2022.

Tal como subrayan desde el departamento autonómico, la crisis de los suministros afecta prácticamente a todos los materiales básicos para la construción –caso del acero, la madera o el aluminio–, por lo que “está dificultando enormemente la viabilidad de la ejecución de la obra pública”. La veracidad del problema queda acreditada, añade Infraestruturas, en la evolución de los precios de los materiales: a tenor de los datos correspondientes a junio de 2021, durante el primer semestre del pasado ejercicio, el encarecimiento fue de casi doce puntos, el mismo incremento que el registrado en todo el período 2007-2020.

Medidas estatales

Esta crisis internacional no es solo económica, sino que también tiene una derivada en la escasez de materiales, con plazos de suministración mucho más prolongados de lo habitual, “lo que se traduce también en incremento de costes de las obras por implicar mayor período de ejecución”, apunta la consellería encargada de la ejecución. Desde la Xunta de Galicia se ha solicitado al Gobierno de España que habilite medidas de revisión de precios extraordinarias para los contratos, que garanticen la viabilidad de las obras públicas. Y afirma que, por su parte, ya ha adoptado medidas en este sentido, dentro de lo que le permiten las competencias autonómicas.

Ante los problemas que van surgiendo en la ejecución de las obras públicas, especialmente agravadas por los condicionantes mencionados, la Xunta “procura soluciones”. Esto es, apostilla, lo que está haciendo en el caso de los trabajos de construcción del CIS de Lalín: “En estos momentos, la Xunta valora las distintas opciones posibles”, de modo que “en las próximas semanas” espera retomar las obras de esta infraestrutura sanitaria.

Crespo: “La obra tiene que estar acabada en diciembre de 2022”

El alcalde lalinense confía en que los plazos se cumplan: “Es una obra adjudicada por la Xunta de Galicia a una empresa seria y que tiene unos períodos de ejecución que los regula la empresa”, declaró ayer José Crespo. “La obra tiene que estar acabada en diciembre de este año, es a lo que se comprometió la empresa”, añadió. Respecto al suministro de materiales, el regidor señala que es una problemática que la compañía “intentará arreglar con la Xunta lo mejor que pueda”. “Las empresas, a veces, hacen a más velocidad unas cosas que otras, apostilla. En todo caso, Crespo recuerda que “el compromiso de la obra es estar hecha a finales de diciembre de este año, y yo calculo que va a estar a finales de diciembre de este año”.