El curso de verano XVI Novas Fronteiras na Igualdade de Oportunidades 2.0 abordaba en su penúltima jornada la cuestión de las violencias. La primera conferencia la ofrecía Isabel Menéndez Menéndez, profesora titular de Comunicación Audiovisual y directora de la Unidad de Igualdad en la Universidad de Burgos. El seminario, titulado Son feminista pero... entre o sexismo benevolente e o sexismo hostil nas industrias culturais, se centró en las relaciones entre las distintas industrias culturales y el sexismo vigente en ellas.
Antes del mediodía, Irantzu Varela Urrestizala, periodista feminista, cogía el relevo para hablar sobre violencia sexual. Durante la charla, Varela explicó que lo que cada sociedad considera “violencia” es un consenso. De este modo, la violencia sexual constituye un concepto “líquido” en el que no se consigue alcanzar consenso ni siquiera en lo que a delimitarlo jurídicamente se refiere.
Cuando utilizó la expresión “violencia sexual” recalcó que no es tal, sino que se trata de violencia patriarcal, una violencia sistemática ejercida contra los cuerpos marcados como mujeres. “Aún en 2021, vivimos en una sociedad que considera que los cuerpos de las mujeres son espacios de conquista, sin agencia propia y que sólo pueden reivindicar respeto si han demostrado ser merecedoras de ello”, señalaba la periodista. Así, durante la conferencia se revisaron algunas propuestas como imponer un debate social sobre el acceso a los cuerpos de las mujeres; desmontar la masculinidad hegemónica y la violencia como uno de sus elementos sustanciales; o visibilizar los espacios “naturalizados” de violencia contra las mujeres.
Para finalizar el día, Carmen Ruiz Repullo, profesora de sociología y experta en coeducación y prevención de la violencia de género, conversaba sobre violencias sexuales en los centros educativos. Desde su punto de vista, vivimos en una sociedad machista educando a los jóvenes en la desigualdad, donde los discursos machistas intentan adaptarse a esta nueva etapa sin levantar sospechas. De este modo, la hipersexualización de las niñas lleva a que ellas mismas interpreten el atractivo sexual como su mejor pasaporte para el éxito y su liberación sexual. “Sin embargo, cuando sexualizamos estamos cosificando a las mujeres y, por tanto, abriendo el camino a la violencia”, afirmaba Ruiz.
Coincidiendo con Mabel Lozano, aseguraba que la pornografía también lleva a estas conductas y que se ha convertido en una forma de instrucción sexual en la adolescencia. Precisamente condenaba la mirada masculina heterosexual que caracteriza a la pornografía, donde la violencia contra las mujeres está presente sin causar escándalo alguno en quien la visualiza. Con todo esto, la profesora invitaba a reflexionar sobre las consecuencias de esta hipersexualización y pornificación de la sociedad.
Últimas ponencias y acto de clausura
Tras unas intensas jornadas en las que se han abordado una gran cantidad de temas, el curso de Igualdade pondrá fin hoy a su actividad. Durante estos días, las matriculadas y demás oyentes tuvieron la oportunidad de escuchar a importantes especialistas llegadas desde distintos puntos del país. Así, se ha hecho un viaje a través de distintas cuestiones: los feminismos, las masculinidades, la educación sexual, las violencias y la coeducación. Los seminarios no solo han servido a las asistentes para formarse, sino también para establecer debates acerca de las mismas. Hoy solo habrá dos ponencias por la mañana, la de la profesora y poeta Elena Fernández Treviño y otra ofrecida por la socióloga Amparo Tomé González. A las 14:15 horas tendrá lugar el acto de clausura, en el que estarán presentes los concejales lalinenses Avelino Souto y José Cuñarro. También se hará la entrega de diplomas a las participantes del curso.
