El sindicato CIG-Ensino entiende que Scientia School, la empresa que adquirió el antiguo colegio Sagrado Corazón (ahora Scientia Lalín) no podrá seguir con los trámites del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), porque expiraron los plazos para presentar los informes.

El sindicato decidió no dar por iniciado el periodo de consultas, puesto que ni recibió la documentación solicitada ni se emitieron las actas de sesión de negociación por parte de la empresa. Así, la CIG entiende que lo lógico es un informe negativo de la autoridad laboral sobre este ERE que pretende despedir a ocho personas.

El 16 de este mes remataba el plazo para que Scientia School y el comité de empresa llegasen a un acuerdo sobre este ERE, y este martes, día 30, cierra el plazo para las dos partes se pronuncien ante la autoridad laboral. Dado que la empresa no convocó una nueva reunión con el comité después de no acudir al encuentro del pasado miércoles por un “supuestamente malentendido”, la CIG entiende que Scientia School “ya tiró la toalla en toda la negociación”.

Denuncia este lunes

El sindicato quiere mostrar su malestar por la actitud de la dueña del colegio y no descarta que a situación termine en los Juzgados de lo Social de Pontevedra. Ahora mismo, a Scientia le quedan tres opciones: iniciar un nuevo expediente de regulación de empleo en el que se cumpla con lo que marca la ley, es decir, facilitando la documentación que pidió la CIG; acometer despidos individuales que serán considerados nulos o improcedentes; o asumir el 100% de la plantilla actual, que era lo que recogían las actas de la subasta del 27 de octubre, cuando se hizo con el centro.

Por último, la CIG denunciará esta situación mañana ante la autoridad laboral y pedirá los informes emitidos tanto por la Inspección de Trabajo como por la autoridad laboral de la Xunta. Así, podrá conocer la situación arbitrada por la administración e informar de la misma a la plantilla.