El gremio de la hostelería de Lalín realizará el próximo 29 de julio, día de su patrona Santa Marta, un reconocimiento al empresario Ovidio Campos Panadeiros. Los hosteleros lalinenses quieren de esta forma reconocer la labor de un hombre que junto a su hermano Adolfo al frente del cine, la cafetería y la discoteca Campos revitalizaron la hostelería en plena década de los 70 del siglo pasado. Como ya es tradición, el homenaje tendrá lugar en el transcurso de la fiesta de los hosteleros que se celebrará en la carballeira de O Montserrat.

Ovidio Víctor Campos Panadeiros nació el 3 de junio de 1932 en A Lagoa (Dozón) y murió en Lalín el 14 de agosto de 2010. El empresario reconocido por la hostelería de Lalín el cuarto de cinco hermanos, siendo Adolfo el más pequeño de todos. Emigró en 1956 a Venezuela como la mayoría de su familia. Allí trabajó un poco de todo, siendo camarero y conductor de camiones, entre otros oficios. Un tiempo después llegó su hermano Adolfo, y con trabajo y esfuerzo consiguieron montar una pequeña empresa de movimiento de tierras, que fue lo que les permitió reunir los ahorros suficientes para volverse a Galicia en los años 70. A partir de ahí, los dos hermanos vivieron a caballo entre Venezuela y España de manera continuada hasta que finalmente vendieron todo lo que tenían en el país caribeño para regresar de manera definitiva.

Negocio nuevo

Ovidio y su hermano Adolfo decidieron, con el dinero que habían ahorrado y algo más que recibieron prestado, montar la discoteca, la cafetería y el cine Campos. En su familia no recordaban ayer la fecha exacta de apertura del negocio, pero sí que la licencia municipal data del año 71. Los hermanos Campos supieron ver un nicho de negocio que por aquellos años no había en Lalín y pensaron en aprovecharlo, convirtiendo la discoteca en todo un referente del ocio en la comarca dezana. Al final, aunque Ovidio fue el que más tiempo le dedicó a la hostelería, tal y como recordaba su hijo David, el negocio fue propiedad de los dos porque, como también señalaba ayer su vástago "ellos a lo largo de su vida todo lo hicieron al 50 por ciento. Las empresas que tenemos ahora son al 50 por ciento, y en aquel momento también todo estaba a medias".

David Campos quiso agradecer el reconocimiento a su padre en la fiesta de la patrona de la hostelería. El hijo de Ovidio manifestó sobre el legado dejado por los Campos en la hostelería que "pienso que habría que destacar un poco la visión que tuvieron tanto mi padre como mi tío de un negocio que en los años siguientes vieron también otros hosteleros de la localidad, y que contribuyeron un poco al crecimiento de la movida que hubo en aquellos años en Lalín". Además, el hijo de Ovidio Campos aprovechó la noticia del tributo a su padre para añadir que "me hace mucha ilusión este homenaje porque él era una persona muy poco dada a los reconocimientos de ningún tipo, pero a la familia sí nos gustan estas cosas, sobre todo cuando son de corazón". El día 29 de julio una representación familiar acudirá al reconocimiento póstumo de Ovidio Campos Panadeiros.