En el curso de esta investigación se detectó que el histórico contrabandista de Dornelas (Silleda) estaba organizando otra operación. Como resultado, el 20 de enero de 2012 se interceptó en una nave del puerto de Alicante un contenedor con seis palés cargados con 192 cajas de tabaco extracomunitario, procedente de Canarias: 46.500 cajetillas de Fortuna Red Line, 10.000 de American Legend, 20.000 de Ducados Rubio y 19.500 de Chesterfield, con un precio total de 339.525 euros, por los que deberían abonar en impuestos 269.340. Este importe tienen que satisfacerlo al Estado cinco de los condenados de forma solidaria, tal como apunta la sentencia de la Audiencia.
Gulías se coordinaba en este caso con Francisco Javier A.B. -siete meses de prisión-, que se desplazó a Las Palmas el 2 de enero para preparar el envío. Manuel M.T. contrató el transporte hasta Alicante, a cuyo puerto entraría un chófer de confianza con la coartada de hacerse cargo de una mercancía legal (385 cajas) llegada desde China el día viernes 13 a través de la empresa de José Manuel G.S. El contacto en Alicante era Santiago N.A. -un año y seis meses-, apoderado de la agencia de aduanas en cuyas instalaciones habría de ser descargado el contenedor. Al quedar privados de libertad, el día 17, los responsables de la operación la tarea de sacar el tabaco del puerto quedó paralizada.
El fallo judicial está fechado el 29 de marzo del presente año y contra el mismo cabe recurso de casación en el plazo de cinco días desde su última notificación.
