El monasterio de Samos se asienta en el extremo norte de la capital del municipio y a esta villa y al municipio les cedió su nombre e historia. El regidor de Agolada, Ramiro Varela, estuvo dos años cursando estudios en este monasterio e indica que muchos otros agoladeses pasaron por las aulas del cenobio benedictino. "18 de 39 alumnos que había en mi época en el convento éramos de Agolada, había gente de todo el municipio: de Artoño, Borraxeiros, Vilariño y de la propia Agolada". Varela confiesa que la razón de que muchos lugareños de esta zona enviasen allí a sus hijos era porque "este internado estaba muy bien de precio y era asequible para muchos". De hecho, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, tal y como confesó en una entrevista, él y un amigo decidieron gastar algunos de sus ahorros para pasar unos días en el monasterio de Samos para reflexionar sobre su futuro, porque no sabían que carrera escoger.