La estradense Andrea Magán y sus compañeras la lalinense Macarena Arcay, Susana López y Tays Ferrer están saboreando estos días un pedacito de cielo, tras haber clasificado su proyecto del dron salvavidas entre los tres mejores del concurso internacional Drones For Good, celebrado por el gobierno de Emiratos Árabes Unidos. Consiguieron un tercer puesto, tras quedar por detrás de un proyecto de Suiza y otro de Alemania.

La aventura se iniciaba a finales del pasado verano, al apuntarse en el certamen por iniciativa de un profesor de la Escuela Universitaria de Diseño Industrial de Ferrol (EUDI), donde estudian el último curso de Grado en Ingeniería Industrial. Después, lo que en un principio era una lotería, se fue convirtiendo poco a poco en un proyecto más real, a medida que fueron pasando fases. Finalmente, el dron capaz de transportar una nevera con órganos para el trasplante, llegó a la final el pasado fin de semana en Dubai después de superar una dura selección compuesta por más de 800 proyectos de 57 países diferentes.

"Quedamos terceras pero nos sabe a victoria porque ni en el mejor de nuestros sueños contábamos con llegar tan lejos", reconoció ayer Magán, emocionada, y añadió: "pasar a la final ya fue un premio y quedar entre los tres primeros ya fue increíble". Ahora, las jóvenes se encuentran de merecido descanso, pues el primer ministro las ha invitado a ampliar su estancia en la ciudad de Dubai. También participarán hoy y mañana en una cumbre mundial sobre tecnología, donde estarán empresas como Google y Microsoft. "Tendremos un pequeño espacio de exposición para el dron y para explicar nuestro proyecto a los interesados. Además a algunas de las charlas estaremos invitadas", detalló la estradense.

No obstante, pese a no haber conseguido el millón de dólares que ofrecía el concurso al ganador para desarrollar la idea, el proyecto gallego sí verá la luz igualmente. Para ello, las jóvenes cuentan con la ayuda de profesores de la EUDI y del grupo IFFE, que las formarán para crear Dronlife, S.L. Además, su participación en Dubai hizo que ya hayan establecido diversos contactos que se han mostrado muy interesados en colaborar con las chicas. "En principio necesitamos colaboración a nivel de know how de la tecnología de los drones, puesto que nosotras somos ingenieras pero de diseño industrial", dice Andrea Magán. También en el concurso que organizaba Indra quedaron en un tercer puesto. Esta experiencia les sirvió para conocer profesionales que pueden aportar conocimientos a su proyecto.

Sobre sus próximos pasos, se encuentra trabajar de lleno para dar continuidad al dron salvavidas pero ya desde Galicia. "Estamos intentando poner todo en marcha para desarrollar nuestro dron propio, puesto que el que usamos aquí es un dron comercial para la demostración del concurso", indica la estradense, y añade: "esperamos q en unos años, nuestro proyecto forme parte de la red de trasplantes en todos los lugares que sea posible".