Ana Cela / A ESTRADA

Quienes tienen la capacidad de sorprender con sus creaciones en la cocina coinciden en afirmar que las prisas no son buenas aliadas entre fogones. Hay quien dice que los alimentos alcanzan la máxima expresión de su sabor si se aderezan con grandes dosis de cariño y se hacen a fuego lento. Este secreto culinario fue el que en la jornada de ayer se puso en práctica en la parroquia estradense de Loimil, que acogió la celebración de la sexta edición de su Festa do Año ao Espeto, un evento gastronómico que se celebra cada año en el marco de la festividad de San Isidro y en el entorno natural de la carballeira de A Saleta.

La Asociación de Mulleres Rurais de Loimil se sumó este año a la comisión encargada de la organización de esta fiesta para contribuir a que todo resultase un éxito. Y lo fue. Más de 400 personas compartieron mesa y mantel para degustar los 20 corderos que desde primerísima hora de la mañana comenzaron a asarse a fuego lento, bajo la supervisión de maestros asadores llegados de Moraña.

Un nutrido grupo de autoridades -entre las que se encontraba la primera teniente de alcalde, Raquel López, y los ediles Manuel Otero Espiño, Manuel Sanmartín, José López, José Antonio Maceira y José Manuel Reboredo- quiso acompañar a los vecinos en una fiesta en la que el pregón corrió a cargo del empresario compostelano Emilio Santasmarinas. Antes de que tomase la palabra, el profesor Manuel Martín Gómez, pregonero de esta fiesta hace dos años, realizó una "pequeña semblanza de una gran persona". Definió a Santasmarinas como un "compostelano que se afana todos los días en dejar el pabellón de Santiago de Compostela en lo más alto" y subrayó el compromiso de este empresario -impulsor de los famosos bombones Pedras de Santiago- con el apoyo a distintas prácticas deportivas.

Cuando tomó la palabra, Santasmarinas hiló un pregón en el que la historia se fusionó con la tradición en una suerte de leyenda que culminó en poesía y que ensalzó las grandezas y la gastronomía de estas tierras estradenses. El presidente de la comisión, José Antonio Couto, entregó un presente al pregonero, mientras que Raquel López y Manuel Sanmartín agasajaron a Manuel Martín y al periodista radiofónico Luis Rial.