Carpetazo sin brillantez a la liga (1-0)

El Pontevedra dio ayer por finiquitada la temporada regular con una victoria por la mínima contra el Racing Villalbés, que necesitaba los tres puntos para rozar un play-off para el que finalmente no tuvo opciones matemáticas. Por parte del bando de Yago Iglesias, el protagonismo se lo llevaron las novedades en el once inicial, con Vizoso bajo palos, Hermelo de central izquierdo y Guèye en ataque, además de minutos para Barbeiro, Azael o Jaichenco en la segunda parte.

La primera ocasión del partido llegó por banda izquierda, gracias a una combinación de Dálisson con Borja. Fue el vigués el que se animó a probar suerte, con un tiro que se marchó alejado a la izquierda de Santomé. Instantes después, fue Guèye, con una galopada de las suyas, el que sirvió un buen balón a Bastos, que no pudo disparar con acierto ante una buena defensa.

En ese contexto, y dada la situación clasificatoria de ambos bandos, sorprendió que la primera iniciativa del encuentro fuese para el Pontevedra, teniendo en cuenta la necesidad del Villalbés, que optaba por dejar correr el partido en busca de ocasiones aisladas.

No obstante, la calidad del equipo lerezano se hizo notar. Tras un córner de cierto peligro, los granates salieron rápidamente en una transición comandada por Dálisson. A campo abierto, un centro suyo encontró con facilidad a todos sus compañeros en el área pequeña y fue Toño Calvo el que remató sin compasión para el 1-0.

Lejos de despertar una reacción en un Villalbés virtualmente descendido, el gol a favor reforzó el protagonismo del elenco granate, que ya se olvidaba de la correosa superficie de juego para marcar la pauta en el encuentro, aunque los chairegos hicieron temblar a la zaga local con dos buenos córners, uno de ellos que desembocó en la mejor oportunidad visitante del primer tiempo, gracias a un derechazo de Álex Pérez que Vizoso despejó con rapidez.

En la segunda parte, el monólogo granate con la pelota no varió, a pesar de que el Pontevedra sufría para poner el 2-0 ante un rival que no jugaba con la intensidad propia de la situación clasificatoria en la que se hallaba. Prueba de ello fue un error clamoroso de comunicación entre centrales en la salida de balón, que dejó a Rufo completamente solo ante el portero. El punta madrileño, sin oposición alguna, erró al trazar un conato de vaselina que Santomé despejó sin problemas.

A partir de ahí, las opciones ofensivas del conjunto lerezano pasaron principalmente por las botas de Libasse Guèye, que tiraba de recursos individuales para centralizar el peligro local. Sus minutos de protagonismo, sin embargo, se produjeron en un momento de letargo de ambos equipos, donde imperaba la imprecisión y el resultado parecía contentar a los dos bandos.

Acto seguido, Yago Iglesias dio minutos a Jaichenco, Padín y Azael, sacrificando finalmente algo de dominio en la posesión del balón, una circunstancia que permitió los mejores momentos del Villalbés, motivado para buscar el empate aunque sin demasiado acierto en sus ocasiones. El partido terminó por resquebrajarse y llegó al pitido final sin más sobresaltos.

Como segundo clasificado matemáticamente, la jornada también decidió cuáles serían los posibles rivales en el sorteo de hoy para el Pontevedra en su primera eliminatoria por el ascenso. El emparejamiento será contra el Deportivo Aragón (Grupo II), el Lleida (Grupo III), el Betis Deportivo (Grupo IV) o el Atlético Paso de La Palma (Grupo V).

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