La disputa de las primeras jornadas de los Campeonatos del Mundo de Luchas Olímpicas en Pontevedra se han saldado con un papel destacado de la selección española en la disciplina del grappling y grappling-gi (con kimono). El combinado nacional, únicamente eclipsado por Kazajistán en la clasificación por selecciones, superó la veintena de medallas en los dos primeros días de competición, centrados en los Mundiales sub-17 y sub-20 de esta modalidad luchística.

La actuación más destacable fue en la categoría femenina sub-17, donde España logró medalla en al menos cuatro de las seis clases de peso en liza, además del segundo triunfo mundialista, con Carla Albitos. Un dominio que también se pudo ver en la primera jornada en la categoría sub-20, con siete medallas en las seis divisiones existentes y el oro de Marina Farray.