El Pontevedra continúa preparando su próximo compromiso liguero contra el Sporting de Gijón B (domingo, 12.00 horas) y en la sesión celebrada ayer sufrió un contratiempo inesperado: la lesión de Jorge Fernández, que será baja prácticamente segura para el desplazamiento a tierras asturianas.

El extremo granate se llevó un golpe en la rodilla en una acción fortuita con su compañero Rufo y, tras ser atendido e intentar reincorporarse al trabajo con el grupo, tuvo que retirarse unos minutos después.

El futbolista asturiano está pendiente de someterse a unas pruebas para determinar el alcance de su lesión y el tiempo que deberá permanecer de baja.

El que sigue siendo duda es Borja Martínez, que continúa arrastrando molestias en el tobillo y que ya se perdió los últimos enfrentamientos por este motivo. Luisito quiere esperar a ver cómo evoluciona en los dos últimos entrenamientos de la semana para valorar si contar con él para el partido contra el Sporting B, para el que sí estará disponible Imanol, tras cumplir un encuentro de sanción.

Un equipo valiente

Es lo que espera Luisito de su Pontevedra, que sea valiente en los partidos que le quedan por disputar. “El otro día (contra el Covadonga) hubo momentos que el equipo se echó atrás y sufrí mucho porque los jugadores saben que no es lo que quiero ni lo que entreno. Me gusta que los equipos entrenados por mí sean valientes, que no renuncien al balón”, afirmó.

Sobre el duelo contra el Sporting B, Luisito señaló que “cuento con que los jugadores que van a estar con el primer equipo en su partido del viernes (contra el Tenerife en la jornada 32 de Segunda A) que el domingo estén contra nosotros, los futbolistas lo saben y estoy preparando al equipo sabiendo que nos va a pasar eso. Pero no por eso vamos a salir con miedo, los que vamos líderes de este grupo somos nosotros, pero tenemos claro que tenemos que plantear un partido para ganar”.

Así, el entrenador del Pontevedra recalcó que “para ganar en Gijón tenemos que hacer las cosas muchísimo mejor” que en las últimas jornadas, porque considera que en esta categoría “estamos todos muy parejos”. Y apuntó también que “los filiales, y lo sé bien porque sé lo que es entrenar a un filial, tienen futbolistas de una calidad individual tremenda y si tienen el día... Muchos están jugando en el primer equipo, entrenando con ellos, lo ven muy cerca y es la motivación extra que tienen, independientemente de estar luchando por salvar la categoría”.