El Pontevedra careció del acierto necesario para haber sacado algo más de su visita al Zamora en un partido que jugó con un hombre más desde el minuto 35 por expulsión del jugador local Piña, pero los de Jesús Ramos no supieron sacarle partido a esta circunstancias y tuvieron que conformarse con un empate que les permite seguir en la parte alta de la clasificación.

El partido pudo cambiar de signo en el minuto 79 cuando Rufo marcó pero el árbitro anuló el tanto por una falta previa sobre su defensor. Nada más comenzar el encuentro ya había anulado un gol a Álex González por fuera de juego.

El Zamora nunca renunció a la victoria pese a jugar en inferioridad y la buscó hasta el final, pero careció también de remate en la punta del ataque.

El Pontevedra saltó al césped del Ruta de la Plata dispuesto a todo y sin ningún tipo de complejo, sin dar un minuto de descanso a su rival y buscando constantemente las bandas para crear peligro. Jesús Ramos presentó un potente sistema atacante con Charles en punta y Alex González con Calvillo y Rufo como medias puntas, que muy pronto comenzó a dar sus frutos. No había transcurrido ni un minuto cuando Calvillo y Charles trenzaban una combinación por la derecha y el centro lo remataba con el pecho Alex González, pero el árbitro señalaba fuera de juego y anuló el gol.

El Pontevedra metía de esta forma el miedo en el cuerpo al Zamora que optó por mantenerse atrás esperando las buenas opciones que siempre le dan Dani y Sergio García a la contra. Y fue Hernández el que se encargó de poner en su sitio al Pontevedra con un lanzamiento de falta que obligó al portero Mario a despejar con los puños.

Pero el control del partido lo tenía el Pontevedra, que no cesaba en buscar la portería contraria. Incluso intentándolo desde lejos con un lanzamiento de Adrián Cruz desde la frontal del área que salió ligeramente desviado tras tocar en un defensa.

Pero la gran ocasión del equipo pontevedrés llegó en el minuto 27 con una internada de Rufo por la derecha que llegó hasta la línea de fondo, pero su centro no encontró rematador de milagro pese a que había ya dos compañeros dentro del área.

Ante el dominio visitante, el Zamora buscaba sus opciones al contragolpe y Coque no pudo culminar uno dirigido por Sergio García poco antes de que llegase la jugada clave del partido en la que el central zamorano Piña vio la segunda tarjeta amarilla por una supuesta mano en el centro del campo. El Zamora CF se quedaba en inferioridad y Movilla optaba por situar al centrocampista Carlos Ramos en el centro de la defensa junto a Adrián Crespo.

El Pontevedra se vio en superioridad pero no supo sacar partido de ello hasta el descanso y, pese a tener la posesión del balón, ya no protagonizó llegadas de peligro.

Segunda mitad

Ninguno de los dos entrenadores hizo cambios en el descanso y en medio de la lluvia comenzó la segunda parte con la misma tónica de un Zamora bien pertrechado atrás intentando que su rival no pudiera pensar demasiado y un Pontevedra sereno y confiado en que terminaría por imponer su superioridad.

Y, ante la sorpresa general, quien llevó la batuta en los primeros minutos tras la reanudación del encuentro fue el Zamora y Sergio García siguió haciendo de las suyas con una jugada personal que culminó con un centro muy peligroso aunque un poco pasado.

La réplica la dio Alex González con un tímido centro desde la izquierda que atrapó sin problemas Jon Villanueva y poco después era Adrián Cruz el que lanzaba una falta desde la izquierda que se perdió mansamente por la línea de fondo.

El Zamora seguía jugando de tú a tú a un Pontevedra que no tenía la claridad de ideas de la primera parte e incluso recuperaban los zamoranos un balón en su campo para que Sergio García lanzase sin pensárselo dos veces obligando a portero Mario ha realizar una gran estirada cuando ya se cantaba el gol.

Siguió la presión zamorana y García volvía a disparar esta vez desde la media luna y Mario volvía a detener con seguridad en balón. El partido estaba loco y el gol podría llegar en cualquiera de las dos porterías porque los visitantes presionaban mucho en jugadas a balón parado.

Hasta que Jesús Ramos decidió dar entrada en el campo a Borja Martínez y Jorge Fernández. Y fue Fernández el que nada más salir forzó un córner que remató Xisco, aunque Villanueva atrapó sin mayores problemas.

Como era previsible, el Pontevedra terminó por encerrar al Zamora en su área y pudo llegar el primer gol en el minuto 71 en un cabezazo de Rufo desde muy cerca que rechazó Jon Villanueva lo justo para que el balón lo rechazase el larguero. Y tampoco quiso llegar el gol en el minuto 79 cuando Rufo parecía haber aprovechado un error en la cesión de Adrián Crespo a su portero pero el árbitro señaló falta sobre el defensor. Y ahí se acabaron el partido y las esperanzas de victoria del Pontevedra.