El balonmano está de celebración en la ciudad. El club que trajo este deporte a la Boa Vila, Sociedad Deportiva Teucro, cumple hoy 75 años en el que no está siendo su mejor año, marcado por la inestabilidad en lo directivo y deportivo. No cabe duda de que Pontevedra tiene mucho que agradecer a la sociedad que nació en 1945 para acoger disciplinas como la gimnasia, el atletismo, que en los inicios tomó mucha importancia, el fútbol, baloncesto, el balonmano, remo, natación, hockey, ciclismo, ajedrez y ping-pong.

Los primeros encuentros de aquel equipo que llegaría a hacer historia eran contra la Escuela Naval Militar de Marín y el Aleta de Vigo. Poco a poco la afición al balonmano fue creciendo y el Teucro jugaba ya por todo el país. El equipo llegó a traer en 1948 a Pontevedra la celebración de la fase final del Campeonato de España, adelantando a aquella ciudad a la gran organizadora de eventos deportivos que es hoy en día.

Las categorías inferiores no paraban de crecer, mientras el primer equipo continúa su trayectoria y la Federación Española de Balonmano concede al club la placa al mérito a la entidad con mayor contribución a la difusión de este deporte. En la temporada de 1972-73 asciende por primera vez a División de Honor, categoría en la que permanecería cuatro años y que le costaría al equipo seis años para volver a disputarla.

Los años 90 traerían la época dorada del club, asentándose en la categoría y llegando a jugar en Europa Copa EHF y aquel histórico partido contra el Elektromos Budapest que los hizo quedar cuartos. El Teucro hacía a Pontevedra grande y llevaba su nombre allí donde iba calando cada vez más fuerte la cultura del balonmano y aún descendido, en 2005 el club trajo a la ciudad la XXX Copa del Rey.

Tras el ascenso de la última temporada el primer equipo ha enfrentado una campaña dura en la que a los deportistas les costó encontrarse en el inicio de la temporada y cuando empezaban a reponerse la pandemia obliga a la suspensión de la liga. Sin presidente el club está a la espera de la realización de unas elecciones mientras la junta gestora asume el mando del club. El viento sopla en contra pero el Teucro siempre se ha vuelto a levantar llevando al balonmano pontevedrés por todo lo alto.