Aunque asegura que "mientras no me escache de todo, estaré disponible para el míster", lo cierto es que las molestias que arrastra desde hace un par de meses en su rodilla han empezado a preocupar a Churre y al Pontevedra. El central no se entrenó en la sesión del lunes, pero ayer volvió al trabajo con sus compañeros con un vendaje especial que le hizo el fisioterapeuta Manu Barros. Asegura que podrá jugar el sábado contra el Rayo Majadahonda (19.00 horas, Pasarón), pero ayer se sometió a una resonancia para analizar qué tiene exactamente en la rodilla y valorar si debe parar para evitar males mayores.

"Llevo un par de meses que después de los partidos, tras hacer esfuerzos grandes, tengo ahí una molestia y hago la resonancia por curiosidad más que nada. Lunes y martes me cuesta entrenar y hacer fuerza en ella, pero después, a partir del miércoles, suelo estar bien", explicó el defensa marinense.

No es el único del que está pendiente Carlos Pouso esta semana, en la que también están entrenando al margen Pol Bueso y Brian Jaén. "No recuerdo una semana en la que estuviéramos todos. Por unas cosas o por otras, siempre pasa algo, pero esto es fútbol y al final va a haber lesionados en todos los equipos, más aún cuando está avanzada la competición. Pero si no está uno, va a estar otro compañero, de eso se trata un equipo", apunta Churre.

El central no se quiere perder el encuentro del sábado, clave "para engancharnos a los puestos de arriba", pues si el Pontevedra gana "nos meteríamos de lleno en esa pelea, que es lo que queríamos desde principio de temporada". El defensa comenta que "nos costó llegar a donde estamos ahora", en sexta posición a cuatro puntos del play off, que marca el propio Rayo Majadahonda. "Hasta ahora aún no hicimos nada. Todo lo mal que lo hicimos al principio, creo que en estos dos o tres últimos meses lo arreglamos un poco, pero aún nos queda mucho margen de mejora y este fin de semana es clave para poder engancharnos o para quedarnos un poco más descolgados".

Rival complicado

Churre destaca que el Rayo Majadahonda es "un equipo que tiene una plantilla con mucha gente el que año pasado jugó en Segunda División, está hecho para estar arriba, para pelear por el campeonato". Pero tanto por la motivación de los granates, como por las características del rival, al central le atraen este tipo de encuentros. "A mí me gustan más los equipos que vienen a jugar al fútbol. Creo que somos más peligrosos cuando un rival viene a proponer por nuestro estilo. Al Majadahonda le gusta tener la pelota, va a venir a Pasarón a jugar al fútbol, no se va a esconder ni se van a meter diez en su área como el Langreo o el Marino, que nos cuesta más entrar".

El marinense espera que el equipo mejore "de una vez" en cuanto a goles encajados para no tener que sufrir tanto para ganar. "Fuera de casa en los últimos partidos ganamos pero remontando. Pero antes empezábamos perdiendo igual y no remontábamos, así que hay que ver el lado positivo", destaca. En este sentido, apunta que "el equipo está creciendo desde la seguridad defensiva y de tres cuartos hacia delante tenemos gente de mucha calidad, con gol, y sabemos que vamos a crear ocasiones, así que si dejamos la portería a cero tenemos mucho ganado".

Contra Las Palmas Atlético, Churre considera que "el equipo sacó ese orgullo que tiene" para remontar un partido que "no era fácil; allí solo ganó el Oviedo, así que no hay que quitarnos mérito".

El central apunta que el Pontevedra se está adaptando al estilo de Pouso. "El míster trajo su idea, creo que se está reflejando en el campo, con circulaciones muy rápidas, verticales, y defendiendo juntos. Al principio cuesta un poco porque cambias de una forma de jugar a otra y tardas en asimilar conceptos, pero creo que poco a poco vamos cogiendo la idea que él quiere. Está claro que nos queda mucho que mejorar, pero vamos pasito a pasito".