Al Centro de Deportes Barco le sigue costando encontrarse cómodo en sus partidos y lograr con ello los tres puntos que le hagan despegar en un tabla que, cada jornada, se hace más cuesta arriba. En la tarde de ayer, los de Javi Rey recibían en el feudo, Calabagueiros, al colista, el Viveiro, con la buena noticia de estar toda la plantilla, a excepción de Iago López, disponible.

Sin embargo, ni todas las buenas noticias cosecharon el final esperado por los barquenses, que vieron desfilar los tres puntos camino de Cantarrana.

El encuentro comenzó con presión por parte de ambos conjuntos, tanto unos como otros necesitaban la victoria y la ansiaban, más, si cabe, el Viveiro que aún no se había estrenado en esta campaña.

Así, pasaron los minutos entre mucho tanteo y mucha defensa buscando dejar las porterías a cero, hasta que Rolle adelantó al los suyos abriendo el marcador. Pero la igualada y la calma las puso un experto Javi Pazos tan solo cinco minutos después y con ella se fueron al descanso.

A la reanudación los locales no tuvieron las mejores de las fortunas, Santé puso uno más en el electrónico y la sentencia llegó con el doblete de Rolle. Ya les toca pensar en el siguiente.