La UD Ourense continúa enganchada a la liga pese a ofrecer un dato demoledor, una sola victoria fuera de casa. Fue en As Pontes, avanzada ya la competición, en diciembre. En otros seis partidos a domicilio puntuaron los rojillos, todos con el mismo resultado, 1-1, que repiten machaconamente. Para encontrar un único triunfo a domicilio hay que descender hasta las dos últimas posiciones, solamente Paiosaco y Pontellas presentan el mismo registro. Los otros dos equipos que ocupan puesto de descenso, Rápido de Bouzas y Somozas, han ganado dos en el caso de los vigueses y tres en el de los coruñeses.
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Llevan muchas semanas los ourensanos haciendo la goma, ahora ma acerco, ahora me alejo, con los puestos que conducen al play off. Más bien con tercero y cuarto, porque los dos primeros son completamente inaccesibles. Abierto hueco por detrás, cinco puntos, es la UD Ourense, octava, la última que podría subirse al tren. Cinco igualmente son los puntos que ahora mismo le separan de ese objetivo, que podrían quedarse ahí o aumentar en uno o en dos, dependiendo del resultado del partido de este martes entre Barco y Pontellas. Un empate la dejará a seis, un triunfo valdeorrés la subirá a siete, con el Arosa entonces como punto de referencia.
Le iría bastante mejor a esta UD Ourense si se siguiesen dando dos puntos por victoria. Porque sin llegar a los extremos del Arenteiro, que ha empatado más de la mitad de los partidos jugados, los datos dicen que los rojillos han igualado nueve, por los trece de los carballiñeses. Sólo le superan el Arosa y el Paiosaco, diez en ambos casos.
Uno de los que más daño le ha hecho ha sido el Pontellas, contra el que apenas pudieron sumar dos puntos de seis posibles. Fueron los pontevedreses los que acabaron con la racha victoriosa que había cimentado la UD Ourense como local, los mismos que encajaron siete goles en la salida siguiente.
El 1-1 es el resultado más repetido, ocho de los nueve empates lo fueron con ese marcador -la excepción es el citado 2-2 frente al Pontellas-. 1-1 acabó también el partido de la primera vuelta contra el Alondras, el próximo rival en el campo de O Couto, el domingo a las cinco. Tocará correr mucho, máxime cuando a unos pocos metros se estará disputando el campeonato de España de atletismo.