El Choco fue el destino del defensa Carlos Pérez Morales tras abandonar en los primeros compases de la competición la UD Ourense en busca de minutos. Su entrenador corrobora las condiciones que no pudo demostrar en O Couto: "Es un chico que entrena espectacular. Le faltaba ritmo, pero quiere aprender y está mejorando mucho. Estoy contento con él, hay que darle tiempo para que asimile donde está". En el plantel que dirige Gonzalo Fernández coinciden además dos jugadores que se jugaron el ascenso contra la UD Ourense en Atios, el defensa Davo y el delantero Cora, así como otros rivales de los unionistas la pasada temporada en Preferente como Fiuza (Bande) y Zamo (Erizana). El entrenador destaca que en el Choco están concienciados de las metas menos ambiciosas de un equipo que hace poco jugaba la promoción de ascenso a Segunda B. "La gente del club lo tiene asumido. Sabe que lo de hasta ahora no era real. El presupuesto es el que es y compites contra equipos que entrenan por la mañana y que lo tienen todo para ser mejores que tú. En los últimos años, la diferencia que había es que no había tanta diferencia. El Choco, con dos entrenadores 'top' como Jacobo y Marcos Montes, se permitía hacer una plantilla para estar décimo que al final acababa mucho más arriba gracias al trabajo y al buen nivel que dieron esos jugadores. El Choco de ahora mantiene su presupuesto con la idea no perder la cabeza y todo el mundo tiene asumido que pelearemos por quedar lo más arriba posible, convencidos de cómo entrenar y cómo hacer las cosas, sufriendo más o menos, pero estando tranquilos porque la temporada es larga", explica Gonzalo Fernández. Su debut un banquillo de Tercera está siendo confortable, asegura: "Mucho mejor de lo que me esperaba. Es un sitio en el que estuve tres años con Marcos y en la sombra es más fácil, pero los jugadores me lo están poniendo fácil. El escenario es el ideal para un entrenador joven que empieza y estoy muy agradecido". En cuanto a los compartimentos estancos de la clasificación, Fernández ve claros "a los seis de arriba, quizás un séptimo" aunque matiza que no se fija en la tabla de momento: "No le hago mucho caso porque ganas y estás octavo y pierdes y te vas al doce".