La Unión Deportiva Ourense recibe mañana en el estadio de O Couto (16.30 horas) al Francelos, el conjunto que arrastra la peor racha de resultados de la liga con diez jornadas sin ganar. Su entrenador, Amancio Rodríguez, considera que la clasificación es injusta con los méritos de un equipo que ha sufrido bajas importantes. "El portero se nos marchó a trabajar fuera, el mediocentro Toni, que era titularísimo, se operó y luego perdimos durante casi un mes a dos jugadores que están en el Ejército y se fueron de maniobras", enumera el técnico de los ribadavienses.

"Todo junto influyó para que tuviéramos este bache. De todas maneras -puntualiza Amancio-, el problema es de resultados más que de juego. Por fútbol, no merecíamos estar ahí. Encajamos muy fácil, fallamos mucho, pero el problema no es de fútbol". El técnico del Francelos se remite al partido más reciente para explicar cuánto tienen la suerte de lado: "Contra el Taboadela creamos ocasiones, pero dos errores puntuales nos costaron dos penaltis y nosotros fallamos otro. Cuando el equipo se ve por debajo en el marcador, se pone nervioso y no damos salido".

La filosofía del club impide buscar refuerzos fuera: "Hay que jugar con gente de la zona. El portero era el único de fuera y hemos fichado a otro que debutará en el Couto". Amancio considera que no hay mejor escenario para vencer al pesimismo: "Vamos a intentar puntuar para acabar con esta dinámica. Quedan 33 puntos, que son más que suficientes para evitar los arrastres. Ganar un partido o puntuar en el Couto nos daría mucha moral".

Asume que será "muy difícil", porque la UD Ourense "es un equipo muy superior por potencial", pero se aferra a lo cerca que estuvieron otros de limarle puntos a los unionistas. "Ya están avisados porque en la primera vuelta nos ganaron en el 97 -recuerda-. No vamos a ponérselo fácil ni vamos a abrirnos a lo loco, porque nadie sale al ataque al Bernabéu o al Camp Nou y es un simil parecido para este partido, porque no son los líderes pero tienen tan buen equipo como el que va de primero".

En el plano personal, el regreso a O Couto es emocionante para Amancio, que fue entrenador de porteros del Ourense cinco temporadas. "Para mí, es una ilusión. Allí viví los mejores momentos en mi vida de técnico y de entrenador de porteros. Es lo máximo que viví y no espero llegar ya a esos niveles. La desaparición del Ourense fue como una punzada en el alma. Espero que le vaya bien a la Unión Deportiva, pero no es Club Deportivo Ourense. Desapareció, queda el estadio y cada vez que paso por allí se me pone el vello de punta".