El Frigoríficos lleva al límite al Bidasoa

El Frigoríficos del Morrazo-Construcciones Castro recuperó este domingo sus mejores señas de identidad y en un vibrante e intenso partido en O Gatañal llevó al límite al Bidasoa Irún, que acabó ganando 25-27. La afición canguesa no dejó de animar ni un solo instante a sus jugadores y al final del encuentro despidió con una sonora bronca a los colegiados del partido, cuyas decisiones provocaron las enérgicas protestas del Frigoríficos en varias fases del encuentro. Los de O Morrazo no sumaron puntos, pero sí sensaciones que ahora deben intentar extender hasta el final de la primera vuelta para salir del pozo.

El Cangas saltó a la pista enrabietado y con el claro deseo de enmendar la mala imagen ofrecida hace una semana en Puerto Sagunto. Al equipo de Nacho Moyano esta vez no se le puede reprochar nada en cuanto a actitud y esfuerzo, aunque ante el Bidasoa pecó de ansiedad y precipitación. Los irundarras lo aprovecharon y, tras un inicio igualado, lograron abrir un hueco de cuatro goles (6-10, min.18), que provocó el primer tiempo muerto de Nacho Moyano. Los locales, más asentados, fueron limando esa diferencia hasta el 13-14 a menos de minuto y medio para el descanso. Pero el Bidasoa castigó sus pérdidas y errores en el lanzamiento para irse al vestuario 13-16.

El Cangas volvió a apretar el electrónico en el arranque de la segunda parte. La intensidad defensiva y las buenas actuaciones de Jorge Pérez pusieron de nuevo el Cangas a solo un gol (16-17). El Bidasoa volvió a estirarse hasta el 16-19 y ahí estuvo una de las claves del partido. Sendos goles de Del Arco y Quintas pusieron al Frigoríficos a solo un gol (18-19, min.39) y con opción de empatar. El Cangas no aprovechó su oportunidad y de un hipotético 19-19 se pasó a un 18-23 en el minuto 45 que fijaba la máxima diferencia del Bidasoa. Entre medias, los árbitros se ganaron la bronca de O Gatañal por su diferente rasero a la hora de señalar acciones en una y otra área.

Los locales no bajaron los brazos y entraron en los últimos diez minutos de nuevo en el encuentro (21-23) y en los últimos cinco minutos contaron con varias ocasiones para ponerse a solo un gol. Sin embargo no fueron capaces de materializarlas y el Bidasoa, con mucho sufrimiento, acabó ganando 25-27.