El Beluso tiene por delante tres auténticas finales. Tres partidos en los que necesita la victoria para alejar el fantasma de los arrastres de la Tercera División y mantener la categoría en Preferente Autonómica. El primero de esos encuentros será este fin de semana en el campo de As Laxes contra el Pontellas, uno de los equipos que se encuentra en puestos de descenso directo. “Tenemos que pasar página con respecto al partido de Arnoia y centrarnos en lo que viene ahora”, afirma el técnico de los bueueses, Serafín Pérez, que aprovecha para pedir a la afición que el domingo acuda en masa al campo para arropar al equipo.
La derrota del domingo ante el Arnoia (3-1) deja de momento al Beluso en la decimoquinta plaza con 42 puntos, con dos de ventaja sobre el decimosexto (Verín) y la zona de descenso. “Creo que el partido lo teníamos bien preparado, pero la verdad es que las sensaciones no fueron buenas. Entramos a la primera media hora del partido como despistados cuando se trataba de un campo que nos exigía intensidad y concentración”, admite Pérez.
El entrenador apunta que para garantizar la salvación hay que llegar hasta el umbral de los 49-50 puntos, lo que prácticamente obliga al Beluso a ganar en las tres jornadas que faltan para acabar el campeonato. El domingo recibe al Pontellas [antepenúltimo y con pocas opciones de salvación], luego visita al Moraña, que es colista y ya está descendido, y acabará en casa ante un Portonovo que no se jugará nada. “Si en estos tres partidos que nos quedan no conseguimos una cifra alta de puntos probablemente tampoco nos merezcamos quedar en la categoría”, advierte el técnico de la Cultural Deportiva Beluso.
Los grupos de Tercera tendrán 18 equipos la próxima temporada
El reciente cambio aprobado hace unos días para aumentar los equipos en Tercera División para la próxima temporada, de 16 a 18 conjuntos, tampoco beneficia al Beluso. Esa modificación, decidida con la liga ya acabada, de momento salva del descenso de Tercera a Preferente a Silva y Viveiro. Los dos son equipos de la zona norte, por lo que solo el grupo norte de Preferente se vería beneficiado por menos arrastres. “Esos cambios suponen modificar las reglas del juego con el partido ya acabado, es una manipulación de la liga”, argumenta Serafín Pérez. Pese a ello no pone excusas e insiste en que el Beluso, que a lo largo de toda la temporada nunca estuvo en puestos de descenso directo, debe ganar las tres finales que le restan para seguir en Preferente.