El Luceros se mide esta tarde (17 horas, pabellón del Berbés, con el arbitraje de los madrileños Arcos Adeva y García Camino) al colista de la Primera Nacional, el Tecdisma Octavio, con la posibilidad de certificar de modo matemático su permanencia en la categoría. El conjunto cangués aventaja en seis puntos al Rasoeiro, penúltimo, por lo que puntuar en Vigo significaría obtener la salvación, igual que si los grovenses no sacan nada positivo ante el Calvo Xiria.

La extraordinaria racha de resultados del filial cangués desde la llegada de Miguel Santorio a su banquillo es el principal elemento al que aferrarse para ser optimista. Los de O Morrazo solo han perdido uno de los últimos ocho encuentros (ante el Carnes do Ribeiro Ourense Provincia Termal) y han sumado en ellos casi el doble de puntos (11) que en los 19 anteriores (6). Por si fuera poco, hoy se miden a un Octavio que ya está descendido y que perdió a su mejor jugador, Strahinja Simic, ahora en las filas del Santoña.

Para este encuentro Miguel Santorio tendrá únicamente la baja de Adrián, y podrá contar con los jugadores vinculados al primer equipo, Ángel Rodríguez, David Iglesias, Pablo Castro y Daniel Peiró, lo que, sin lugar a dudas, le confiere un mayor potencial a la escuadra canguesa. Ganar también podría permitirle escalar posiciones en la tabla clasificatoria y pelear en esta recta final hasta por la novena plaza.