El Disiclín Balonmán Lalín se hizo esta tarde-noche con algo más que 2 puntos en la visita del Balonmano Ingenio al multiusos. Los de Pablo Cacheda necesitaron del mono de trabajo para poder finalmente tumbar a un rival directo (29-27) y, también, dar un golpe a la liga en un choque que finalizó con el público puesto en pie. Los rojinegros se encontraron a un contrincante de su nivel, en un partido que sin llegar a ser brillante mostró un balonmano como se esperaba por ambas partes y con emoción casi hasta el final. El Ingenio resultó ser un equipo poderoso en lo físico, rocoso, de mayor envergadura que el Disiclín y poseedor de un gran lanzamiento exterior pero que en la segunda mitad acusó el desgaste del choque. 

El Disiclín planteó de inicio una defensa 5/1 que, sin embargo, no consiguió dar con la tecla para poder frenar el poderoso lanzamiento de 9 y 7 metros canario, sobre todo de su lateral Novelle, que también jugó de central y que firmó 13 dianas. Los de Cacheda se encomendaron a sus combinaciones en el juego y a buscar movimientos en 7 metros tanto con el pivote como con los extremos para llegar al recreo con un ajustado parcial de 14-13 a su favor.

En la reanudación, Cacheda apostó por rectificar su planteamiento inicial para pasar a jugar con defensa 6/0 adelantada que, esta vez sí, lograba frenar los lanzamientos de los insulares. Contra todo pronóstico, Tomás no tuvo el día bajo palos, aunque mejoró tras el descanso, y cambió su puesto por Iago, que sí realizó intervenciones de mérito en los ataques del Balonmano Ingenio. A los 2 últimos minutos se llegó con una ventaja de un gol para los de Lalín después de que Novelle elevase el 28-27 al electrónico. La posterior exclusión de Martín dejó al Ingenio en inferioridad y Ramón certificó la victoria número 20 con un gol que hizo estallar a la grada del Lalín Arena.