Disiclín Balonmán Lalín y OAR Coruña jugaron ayer un emocionante partido entre los dos mejores equipos del grupo que, lamentablemente, finalizó con una tangana en medio de la pista tras firmar tablas (23-23). Rojinegros y blanquiazules compitieron de poder a poder en un duelo donde las defensas consiguieron imponer finalmente su ley. Los últimos instantes de la contienda demostraron que ayer había en juego en el Arena más que 2 puntos. Tras una buena intervención de Iago a tiro de Diego llegó la última jugada del encuentro en la que los colegiados pitaron 7 metros a favor de los locales con el tiempo cumplido, una decisión que fue muy protestada por los coruñeses.

La responsabilidad del lanzamiento en el Disiclín recayó en el joven Javi que, sin embargo, no pudo batir al siempre seguro bajo palos Iago. Acto seguido Jacobo Novoa, delegado del OAR Coruña, protagonizó una impresentable escena realizando cortes de manga al público presente en el multiusos. Ese fue el detonante de la trifulca entre integrantes de ambos equipos con la que acabó un partido donde, a pesar de todo, se pudo ver un buen balonmano sobre el 40x20 lalinense.

En lo estrictamente deportivo, lalinistas y herculinos protagonizaron un duelo sin grandes ventajas en el marcador, aunque los visitantes se fueron al recreo con una mínima diferencia a su favor (11-13) ante un Disiclín que nunca le perdió la cara al choque. Los de Aguirre consiguieron su mayor ventaja (9-12) en el minuto 23 con un tanto de Juancar, algo que no pudieron repetir en la segunda mitad. En la reanudación el Disiclín apretó los dientes para poder llegar al final con opciones. Un acertado, ayer, Losón hizo el 23-22 en el minuto 27 antes de que llegase la tempestad con la que finalizó el encuentro.