Fútbol

Primer paso para recuperar el césped de A Lomba

Las máquinas de la Diputación comenzaron ayer con tareas de regeneración del tepe

El césped de A Lomba trajo de cabeza al Concello y al club durante el invierno.

El césped de A Lomba trajo de cabeza al Concello y al club durante el invierno. / Noé Parga

A. G.

No se plantará un césped nuevo, pero el Concello de Vilagarcía quiere evitar que se vuelvan a registrar las imágenes de la pasada campaña, en las que el tepe del campo de A Lomba acabó convertido en un auténtico desastre en varios partidos. Máquinas de la Diputación de Pontevedra iniciaron ayer las tareas de regeneración que han diseñado los técnicos y han procedido a una escarificación del terreno para saber como se encuentra el terreno y buscar una fórmula para solucionar los problemas de drenaje.

Carlos Coira, edil de deportes, reconocía ayer que, para acometer estos trabajos, “hemos mantenido varios contactos con el Arosa y el Atlético Arousana explicándoles que la intención es que el campo quede en perfectas condiciones a lo largo del verano e intentaremos que resista en lo más crudo del invierno”.

En dos semanas, reconoce Coira, está previsto que se proceda a un picado del terreno de juego y a la resiembra de césped en las zonas más castigadas. Además, desde el lunes se procederá a un abonado especial que incluirá diferentes tratamientos para evitar que el césped pueda acabar dañado. “Cuando comience la temporada es complicado realizar este tipo de tareas, por eso hemos dado el paso ahora y aguardamos que, durante el verano, quede en perfectas condiciones”, explica Coira.

La opción de cambiar todo el césped estuvo encima de la mesa, pero el coste era brutal, ya que supondría un desembolso de unos 600.000 euros. Además, explica Coira, “los técnicos tampoco tenían claro que esa actuación pudiese solucionar los problemas y que no la veían tan necesaria, por eso hemos optado por lo que estamos haciendo en estos momentos y que se va a desarrollar durante todo el verano”.

Los problemas del césped de A Lomba son ya una tradición cada año, especialmente durante el invierno. El pasado no fue una excepción y esos problemas se vieron acrecentados por las persistentes lluvias, que acabaron provocando que estuviese excesivamente blando, se levantase constantemente, e incluso, desapareciese en importantes extensiones del campo.

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