Las bajas ponen al Asmubal en una situación muy complicada tras caer ante el Tenerife (25-32)

Cuarta derrota consecutiva de un Inelsa Solar que entra en crisis condicionado por unas bajas determinantes. Y es que la central Eli Méndez, se suma ahora Sofía Arangio, que era precisamente la primera línea emergente en liga y, que se confirma, se pierde también la temporada por la rotura del ligamento cruzado anterior.

Ante el Santa Cruz de Tenerife no pudo el mermado Asmubal, que acabó por sucumbir ante un equipo superior en lo físico. Los de Juan Costas aguantaron el primer cuarto de hora. A partir de ahí, llegaron los errores y la sensación de que todo podía salir mal.

El equipo se resquebrajó anímicamente. Así en tan sólo 9 minutos fatídicos las verdinegras encajaron un parcial de 2-8, que llevaba el electrónico del 7-9 a un 9-17 que dejaba el partido prácticamente imposible.

Tras el 10-19 del descanso, la segunda parte fue un querer y no poder. Por momentos, el equipo atisbaba la posibilidad de soñar con engancharse a partido. Se llegó a un 23-29, pero no se pasó de ahí. Con los mimbres que tenía en banco Juan Costas mismo tiró de sus juveniles para tratar de dar oxígeno a sus jugadoras.

Juan Costas valoraba que “con las bajas que tenemos somos un equipo endeble. Tal y como estamos, nos puede ganar cualquiera, y temo no ganar partido en lo que queda”.

En la misma línea apunta que “invertir la situación pasa por traer alguna jugadora en este parón navideño, pero esa es una cuestión económica de si el club puede o no dar el paso”. A la par, lamenta la dificultad de hallar ese refuerzo para la posición de central: “Traerlo del balonmano gallego es casi imposible. La opción que queda es un fichaje extranjero. Eso supone dinero y, de invertir, tenemos que hacerlo con una jugadora de garantías”.

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