El Ribadumia tenía que ganar y lo hizo. Un triunfo con mensaje, no solo por superar a un equipo que llegaba en lo alto del grupo, sino por la forma en que se consiguió con una propuesta tan pulcra como atrevida tanto en la lectura como en la ejecución del plan marcado desde el laboratorio de Luis Carro.
Salió el Arzúa dispuesto a dominar desde su poderosa estructura defensiva. Baleato dibujó un 5-4-1 que no sorprendió a los locales, más bien todo lo contrario. La interpretación de por donde encontrar las debilidades a su rival fue impoluta y el balón se convirtió en un objeto de persecución para los visitantes que no encontraban la manera de tapar tantas vías de agua.
La interpretación de por donde encontrar las debilidades a su rival fue impoluta y el balón se convirtió en un objeto de persecución para los visitantes
La aparición por las bandas de los dos laterales aurinegros fue constante. Cada superioridad generada por dentro servía para alimentar una y otra vez tanto a Santi como a Diego Abal. El Arzúa perseguía sombras y pronto el marcador quiso reflejar la avalancha de fútbol de los locales. Fue tras una acción por banda izquierda que el propio Diego Abal transformó en el 1-0 tras un doble remate.
El Arzúa perseguía sombras y pronto el marcador quiso reflejar la avalancha de fútbol de los locales
Tan solo habían transcurrido 20 minutos y el Ribadumia ya había abierto la lata ante un rival que se caracteriza precisamente por su fortaleza defensiva. Lejos de echarse atrás, la apuesta valiente se mantuvo aunque costó más llegar con claridad. Las acciones de estrategia tomaron el protagonismo, pero sin lograr remates francos.
Pese a la dificultad para poder acercarse a la portería de Pazos, los arzuanos sí llegaron a disponer de un disparo al palo con Vivito como protagonista. El rechace lo transformó Íker Hurtado, con la fortuna de que fue anulado por fuera de juego.
La insistencia de los de Luis Carro obtuvo premio antes del descanso con un gol clave. Charles fue el autor tras una larga jugada que finalizó con un excepcional centro de Álex Fernández que el delantero brasileño remató de cabeza anticipándose a toda la defensa en el primer palo.
La sociedad Borja Míguez-Íker Hurtado estaba inquietando a los centrales aurinegros hasta que Luis Carro pasó a jugar con línea de tres centrales
Como cabía esperar, el Arzúa agitó su estructura pasando a jugar con dos puntas. La decisión sacó a los locales del ritmo que habían establecido y les incomodó muchísimo más. Pese a ello, el Ribadumia siguió encontrando un buen caudal de fútbol por las bandas. La sociedad Borja Míguez-Íker Hurtado estaba inquietando a los centrales aurinegros hasta que Luis Carro pasó a jugar con línea de tres centrales y controlar mejor la actividad de la dupla atacante rival.
Antes de la reordenación táctica, Álex Fernández llegó a disponer de dos buenas situaciones para sellar definitivamente el partido, pero no acertó. Sí lo hizo Javi Domingo en las postrimerías. Fue en una acción a balón parado en la que el central vilagarciano remató por dos veces con el tacón para rubricar una victoria muy valiosa de cara al propósito de eludir las ocho últimas posiciones.
Con este 3-0, el Ribadumia consigue su segunda victoria en los tres encuentros disputados de la liguilla de permanencia a la espera de disputar el duelo aplazado ante el Estudiantil el miércoles también en A Senra.
Ficha del partido:
Ribadumia: 3
Roberto Pazos, Santi (Eloy Conde, min. 81), Javi Domingo, Pablo González, Diego Abal, Óscar Iglesias, Giráldez (Óscar Martínez, min. 56), Álex Fernández (Cerqueiras, min. 81), Fran Matos (Cheri, min. 56), Hugo Soto (Carlos, min. 71) y Charles.
Arzúa: 0
Marqueta, Dani Blanco, Queiruga, Taboada (Pedro Delgado, min. 46), Álex Vázquez (Diego Fuentes, min. 77), Brais Pedreira, Vivito, Tomé, Marcos García, Sergio Otero (Borja Míguez, min. 46) e Íker Hurtado.
Goles: 1-0 Diego Abal (min. 20); 2-0 Charles (min. 43); 3-0 Javi Domingo (min. 86).
Árbitro: García Rodríguez (A Coruña). Mostró amarilla a Hugo, Diego Abal y Pablo González por los locales, y a Íker Hurtado y Dani Blanco por los visitantes.
Incidencias: Cuarta jornada de la liguilla por la permanencia. Cerca de 200 personas en A Senra.
Luis Carro: “El 2-0 antes del descanso nos dio tranquilidad”
Contento por la victoria y por el camino elegido para ello se mostraba Luis Carro. En su valoración destacaba que “estuvimos muy cómodos con el balón en la primera parte. Leímos muy bien el partido y jugamos a un nivel muy alto. Supimos hacerles daño y el 2-0 antes del descanso nos dio tranquilidad y creo que merecido premio a lo que estábamos haciendo”.
Leímos muy bien el partido y jugamos a un nivel muy alto
Pese a la mejoría del Arzúa en la segunda parte, el técnico del Ribadumia quiso valorar que “estuvimos muy serios pese a estar condicionados por las circunstancias de bajas puntuales. En partidos anteriores sufrimos en casa incluso con marcador a favor y esta vez estuvimos muy bien durante los noventa minutos. Muy sólidos y muy concentrados”.
De la importancia de los tres puntos también habló, “nuestra permanencia sabemos que pasa por lo que seamos capaces de hacer en casa. Esta es la línea a seguir”.
