El CEV 2017 sumó ayer su décima victoria consecutiva, un triunfo que le devuelve a lo más alto de la clasificación a la espera de lo que ocurra con el SAMMIC en el encuentro que hoy mide a los vascos con el L'Hospitalet. Aunque el resultado diga lo contrario, los hombres de Manu Santos no tuvieron un partido fácil, ya que el Navarra siempre dio la cara, hasta que en el tercer cuarto se cargaron de faltas personales los hombres más importantes del cuadro pamplonica. En el último cuarto, los hombres de Manu Santos sentenciaron gracias a la aportación de Brantley Osborne, que finalizó el partido de manera excelsa, aunque todo el equipo ofreció un atractivo juego coral.

Los cambadeses entraron lanzados en el primer cuarto. Nada más comenzar a rodar el balón, los amarillos le endosaron un 0-9 a los locales que mostraba su superioridad sobre la pista. Parecía que los hombres de Manu Santos querían cerrar cuanto antes el encuentro y sumar una décima victoria consecutiva que les dejaría líderes. Intensidad y acierto en el tiro fueron una constante, pero ese buen hacer comenzó a venirse abajo en el término de ese cuarto y en el inicio del siguiente. El Basket Navarra es un buen equipo que no solo consiguió detener la sangría, sino que comenzó a meter en problemas a los amarillos. En el segundo cuarto, los navarros fueron limando la diferencia poco a poco, hasta ponerse por delante en el marcador (26-25). Dos triples consecutivos de Nkaloulou y Osborne frenaron la sangría, mientras Pedro Romera sostenía el rebote del equipo. Los tres dieron cierto aire a un CEV 2017 que ya no se encontraba tan cómodo y que comenzaba a sufrir, mientras el Navarra llegaba vivo al descanso.

El tercer cuarto no dejó un juego atractivo, con los dos equipos muy erráticos en ataque, aunque el CEV 2017 supo leer mejor el encuentro frente a un Navarra en el que los hombres importantes se cargaban de faltas personales. Un triple de Mauri Cheda sobre la bocina permitía a lo amarillos llegar al último cuarto con 10 puntos de ventaja sobre su rival.

Los locales llegaron muy tocados al tramo final del encuentro, y lo acabarían pagando ante un CEV 2017 que volvió a ser el del inicio, intenso en defensa y letal en ataque.