El fútbol vuelve con el año nuevo a San Pedro (16.30 horas). El Villalonga tratará de empezar el 2017 con las mismas sensaciones que finalizó el 2016, si bien las dificultades para salir airoso del envite se hacen evidentes por la etiqueta de segundo clasificado que se ha merecido el Rácing Vilalbés.
Las dificultades por las que atraviesa el equipo de Antonio Fernández en cuanto a número de efectivos se han multiplicado de cara a esta jornada. Y es que el técnico solo cuenta con los dieciséis jugadores exactos para conformar la convocatoria tras la salida del equipo de Íker Hurtado, Pana y Martín y las bajas de los sancionados Renda y Padín.
Con todo ello, Fernández deja claras las intenciones de su Villalonga, "el equipo ha entrenado muy bien y quiere seguir mostrando una buena línea. Es cierto que el Vilalbés está muy fuerte, pero fuera de casa solo ha sido capaz de ganar dos partidos. Nosotros vamos con el claro objetivo de devolverles la moneda de la primera vuelta, pero respetando mucho al rival".
La presencia de Sergio Arias y Gerardo, al que el técnico local califica de "desequilibrante", son dos de las principales amenazas para un equipo celeste que quiere volver a ganar en casa cuanto antes.
