El Universitario de Ferrol tuvo que emplearse para superar al Portomar

El Portomar Cortegada desprendió buenas sensaciones en su primer test de la pretemporada. El equipo de Rubén Domínguez no se arredró en ningún momento ante un rival como el Universitario de Ferrol que este año estrenará la vitola de equipo de la máxima categoría.

La puesta en escena de los dos equipos ya hacía intuir que los errores iban a marcar la pauta en la ofensiva. El físico de las jugadoras de Lino López dificultaba todo camino al aro a las vilagarcianas, que se agarraban el partido con Sara Gómez tirando del carro.

Al descanso todo estaba por decidir (31-38), pero la salida en tromba de las visitantes en el tercer acto puso las cosas muy cuesta arriba al Portomar Cortegada. Las rotaciones empezaban a hacer valer su peso en el encuentro y, en esta materia, el Universitario de Ferrol es un equipo mucho más armado.

Diecisiete puntos fue la ventaja a superar en los últimos diez minutos. Empresa que resultó imposible, pero nadie podrá negar el empeño en hacer las cosas bien así como la competitividad mostrada por las jugadoras de Rubén Domínguez.