Todo en el aire en el Rápido de Bouzas tras la reunión con el mediador

La crisis del Rápido prosigue después de una reunión con mediador, el coordinador del Pereiró, José Manuel Castiñeira, que ha resultado infructuosa. Los entrenadores del fútbol base del club boucense acudieron en compañía de algunos padres. Aunque el presidente, Alfonso Caneiro, no se encuentra en Vigo, esperaban que compareciese mediante videoconferencia. No sucedió así. Según las fuentes consultadas, tras una primera discrepancia sobre el resultado de esa reunión, los cuerpos técnicos esperan ahora la dimisión de dos miembros de la junta directiva para que se fuerce así el paso a una junta gestora.

La tormenta azota con fuerza a Bouzas. Tras el comunicado difundido entre las familias por los cuerpos técnicos del fútbol base el martes por la noche, varios de ellos apoyados por padres y canteranos se concentraron el miércoles por la tarde en el Pujales. Y este jueves seguían circulando acusaciones a la actual directiva (cuentas, cantina, duchas, vestuarios, incremento de cuotas, deudas) y propuestas para buscar sucesores. De todas formas, en un colectivo tan grande –hay 500 canteranos– es posible apreciar un amplio abanico de actitudes.

Un cisma de consecuencias impredecibles en el Rápido de Bouzas

Caneiro, por su parte, ha encontrado apoyo en su predecesor, Manolo Seoane, que lo ha conminado a resistir. Y le ha recordado que solo los socios tienen derecho a reclamar su marcha. Seoane quiere reunirse este viernes con los entrenadores. Por otra parte, si Caneiro da el paso, se abrirá un proceso incierto. Diferentes instituciones y patrocinadores han mostrado su preocupación por la crisis.

Los entrenadores y las familias que los secundan apuestan, sin embargo, por ese relevo al frente del club. La junta gestora debería convocar unas elecciones a las que solo podrían presentarse los socios (el club tiene aproximadamente un centenar) con más de 24 meses de antigüedad.