Femke Bol fue la gran heroína en el cierre de los Mundiales

La prodigiosa neerlandesa realizó una remontada de otro planeta para colgarse el oro en 4x400

Bol empezó el Mundial cayéndose en los 4x400 mixtos, arrasó en 400 vallas y se marcha con dos oros

Femke Bol completó una proeza en el 4x400 femenino

Femke Bol completó una proeza en el 4x400 femenino / EFE

David Rubio

Minutos después de la plata de Mohamed Katir en 5.000 metros, la última prueba del Mundial de Atletismo de Budapest ha permitido redimirse por completo a Femke Bol con una remontada espectacular que se antojaba imposible para dar a los Países Bajos el oro en el relevo 4x400 metros femeninos cuando parecía imposible.

No ha sido un campeonato sencillo para esta sensacional cuatrocentista en una larguísima temporada en la que a finales de febrero destrozó con 49.26 el histórico récord de Europa de 400 en pista cubierta que estaba en posesión de la checoslovaca Jarmila Kratochvilova desde 1982 por 33 centésimas.

Oro en el pasado europeo en 400 lisos, 400 vallas y 4x400, la tercera clasificada en 400 vallas en los pasados Juegos Olímpicos llegaba a Budapest con el objetivo de colgarse tres oros y más sin la presencia de la plusmarquista universal de las vallas bajas la estadounidense Sydney McLaughlin.

Todo tendría que haber empezado en la primera jornada con el relevo 4x400 mixto y lo cierto es que Bol recibió en primera posición el testigo del veinteañero Klein Ikkink y en la contrarrecta aventajaba en cinco metros a la estadounidense Alexis Holmes... pero fue perdiendo ventaja, se crispó en la recta y se fue al suelo casi en los cuadros, dejando escapar el testigo. Países Bajos fue descalificado y la de Amersfort, de solo 23 años, se fue con la cabeza gacha.

Bol provocó el delirio entre sus compañeras

Bol provocó el delirio entre sus compañeras / EFE

La neerlandesa dominó con enorme autoridad los 400 metros vallas y en el cierre de los Mundiales realizó la última posta en el 4x400 metros femeninos. Recibió el testigo en tercera posición y a la entrada de la recta final estaba a cuatro metros de Gran Bretaña y a diez de Jamaica. Bol dio caza a la británica, pero Stacey Ann Williams estaba a un mundo. No bajó los brazos y en la misma meta se hizo con la primera posición (3:20.72), 16 segundos menos que las caribeñas.

De esta forma, la gran estrella 'oranje' se fue de Budapest con muy buen sabor de boca y convertida en la gran protagonista de la celebración regaló el cuarteto de Países Bajos. habían logrado un imposible, pero es que Femke Bol no parece de este planeta.

El otro protagonista de la jornada fue el indio Neeraj Chopra, quien llegaba con la mejor marca del año a la final de lanzamiento de jabalina y acabó imponiéndose con claridad con 88,87, seguido muy de cerca por el sorprendente pakistaní Arshad Nadeen (87,82) y por el checo Jakub Vadlech (86,67).

El indio Chopra impuso su ley en la jabalina masculina

El indio Chopra impuso su ley en la jabalina masculina / EFE

Curiosa la internacionalización de la jabalina masculina, que en el Mundial de pekín'15 vio ganar al keniano Julius Yego y que en 2019 y en 2022 vivió la victoria del granadino (de la isla caribeña) Anderson Peters. Además, en los Juegos de Londres'12 venció el triniteño Keshorn Walcott y en Tokio se impuso también Chopra.

Para completar la jornada final en el National Athletics Centre, también se colgaron el oro la ucraniana Yaroslava Mahuchikh en altura (2,01 m), la bahreiní Winfred Mutile Yavi en 3.000 obstáculos (8:54.29) y la keniana Mary Moraa en 800 con 1:56.03, 31 centésimas menos que la genial británica Keely Hodgkinson con la campeona olímpica estadounidense Athing Mu relegada a la tercera posición con 1:56.61.