Boxeo

Corazón y cabeza para recuperar el cetro

Una charla motivacional y una táctica precisa llevan a Suero a reconquistar el cinturón en tres asaltos

Manuel Jiménez, Brais Méndez y José Gregorio Suero, tras la pelea en Porriño.

Manuel Jiménez, Brais Méndez y José Gregorio Suero, tras la pelea en Porriño.

Armando Álvarez

Armando Álvarez

Ha anochecido en Porriño. Faltan pocos minutos para que José Gregorio Suero Martínez salte al cuadrilatero. El cinturón nacional superwélter está en juego. Suero charla con Manuel Jiménez. Su entrenador le recuerda el camino recorrido en sus doce años de asociación. Enumeran los sacrificios y los disgustos, el título que le arrebató el árbitro en Alcalá de Guadaira y la desgana municipal que le veta los pabellones vigueses desde 2020. En esa intimidad del vestuario recuentan cada golpe y cada cicatriz. Toda la sangre y el sudor derramados conducen a este instante. “La charla nos vino bien a los dos para salir enchufados”, relatará Jiménez. Suero, que llegó a plantearse la retirada, ha completado su resurrección. Su victoria sobre Sergio Fernández por KO técnico en tres asaltos abre la puerta a horizontes europeos.

Lo emocional impulsa. Pero es lo táctico su sustento. Jiménez sabía de la dura preparación de Sergio Fernández. Los sparrings habían castigado la nariz del asturiano. Instruyó a Suero para hurgar en esa debilidad. Su pupilo ejecutó el plan con agresividad y variedad en el golpeo. A los 30 segundo ya le había abierto una brecha a Fernández, que sería decisiva. No ofreció cuartel. Minó el cuerpo y sentenció en el rostro. El árbitro requirió el diagnóstico del médico durante el tercer asalto. La profusión de la hemorragia aconsejó el final. No hubo protestas en la esquina visitante.

“Es mucho esfuerzo durante muchos años. Es un deporte muy bonito y he aprendido mucho. El boxeo te enseña cómo es la vida”, valoró Suero a preguntas de la Federación Gallega. “Estoy muy contento, la verdad. Siempre quieres dar tu mejor versión. Mucha gente se ha desplazado. He recibido muchos mensajes. Doy las gracias a todos. Esto es también para ellos”.

El pabellón de Porriño, lleno con 1.500 devotos, festejó ese tercer título de Suero. Entre los asistentes, su amigo Brais Méndez y el capitán céltico, Hugo Mallo. El púgil se mostró “agradecido” a Brais. “Siempre me ha apoyado. Es un honor para mí poder salir con su camiseta y la del Celta. Lo seguirá siendo”.

“Salimos a recuperar lo que era nuestro y que no deberíamos haber perdido si tuviésemos el apoyo de Alcaldía”, dice Jiménez. Se refiere a aquella defensa en Guadaira por la falta de apoyos en Vigo. La decisión arbitral favoreció a Óscar Díaz. El andaluz dejó desierto el trono para optar al cinturón de la Unión Europea. Pero su adversario se ha retirado. Y Jiménez, amparado en el ranking, postula ahora a Suero. “Por fin habrá revancha”, celebra Jiménez. Esta vez, con un cinturón continental en disputa. El entrenador ya anticipa: “Con José hay boxeador para rato. Nos dará muchas alegrías”.