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Las amotinadas exigen sumisión

Las quince futbolistas que renunciaron a la selección por sus diferencias con Vilda piden en una reunión a sus sustitutas que las apoyen y no vuelvan cuando sean convocadas

Las jugadoras de la selección, antes del duelo ante Estados Unidos en Pamplona. // RFEF

Las jugadoras de la selección, antes del duelo ante Estados Unidos en Pamplona. // RFEF / REDACCIÓN

REDACCIÓN

La tormenta en torno a la selección femenina de fútbol, lejos de amainar, se intensifica con episodios cada vez más difíciles de asimilar. Este miércoles se produjo un tenso cara a cara entre las futbolistas que renunciaron a la selección española femenina mientras Jorge Vilda siga como seleccionador y las jugadoras más jóvenes que las sustituyeron en la última convocatoria.

La brillante actuación de la selección española femenina con las nuevas jugadoras (empate ante Suecia y victoria sobre Estados Unidos) ha provocado que las amotinadas contra los métodos de Jorge Vilda vean que sus opciones de perderse el Mundial crecen ya que Rubiales y la RFEF no parecen tener intención de ceder a lo que consideran un chantaje. De ahí que haya comenzado a surgir el nerviosismo entre un grupo de jugadoras en las que hay varios miembros de la junta directiva del sindicato FUTPRO que medió para convocar la reunión con los dos grupos de jugadoras (las que renunciaron a la selección y las que fueron en su lugar) y de la que salió una consigna clara: había que apoyar a las díscolas.

El diario Marca reveló ayer que las jóvenes futbolistas se vieron presionadas en la reunión organizada por FUTPRO y por las tres futbolistas que representaron al grupo en rebeldía, Laia Alexandri, Ona Batle y Nerea Izaguirre. La reunión se llevó a cabo de manera telemática, siendo varias las que la conservan de manera íntegra. “¿Cómo no vamos a ir las quince mejores jugadoras a un Mundial?”, se preguntó Nerea Eizaguirre en una intervención, según explica el diario deportivo madrileño, que dejó perplejas a sus jóvenes compañeras. En la información se insiste en que se produjo un intento de influir en el comportamiento de las otras jugadores sugiriendo que se sumaran a su protesta. La postura de FUTPRO durante la reunión fue contundente, respaldando en todo momento la postura de las jugadoras en rebeldía e intentando que las más jóvenes siguieran el mismo camino. En ese sentido, FUTPRO y las 15 exigieron un comunicado a las nuevas internacionales absolutas. Tras las presiones y ante el temor a “coacciones”, decidieron redactar un comunicado algo ambiguo para tratar de “minimizar” posibles daños.

La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) confirmó horas después que se había producido esa reunión y la desagradable situación para las jóvenes jugadoras a quienes, según el sindicato de jugadores, se les reclamó que fingieran una situación emocional y obtener un informe médico que les permitiera no acudir.

El sindicato destacó que según dicha información “el papel de FUTPRO fue contundente, tratando de que las jóvenes siguieran el mismo camino de rebeldía para dejar vía libre al regreso de las quince”, y también que lo que presidenta de FUTPRO dijo a las jugadoras. “Lo que tenéis que hacer es ir a ver al psicólogo de vuestro club y luego hacer el paripé”.

“AFE rechaza categóricamente estas presuntas conductas y respalda a todas las futbolistas de la selección española, con el fin de que no sean presionadas para aceptar una situación que las perjudica directamente, en beneficio de los intereses particulares de un sindicato. Intereses que se ha demostrado no coinciden con el sentir mayoritario de las futbolistas”, señaló en un comunicado

El sindicato que preside David Aganzo aseguró “se trata de un hecho intolerable” y recordó que “lleva tiempo ayudando a los y las futbolistas que sufren este tipo de dolencias”. “Conocemos el desgarro que provocan en cualquier persona y la gravedad de las mismas como para que la presidenta de un sindicato trivialice con algo tan delicado”, añadió.

Para AFE, “esta situación, protagonizada, presuntamente, por una abogada en ejercicio es sumamente grave, puesto que podría considerarse que está induciendo a las futbolistas de la selección española a cometer una actuación ilegal”.