Javier Gómez Noya confirmó que su gran objetivo para la segunda mitad de la temporada de 2022 será el Mundial de Medio Ironman, a finales de octubre, después de descartar el Mundial de Ironman de Kona (Hawái), ya que sería “arriesgado” y “un poco una lotería”, después de haber sufrido COVID hace apenas unos meses.

“Mi objetivo era Kona y eso está complicado por el periodo de clasificación, sería arriesgado intentar competir para clasificarme, sería un poco una lotería. No tendría tiempo de preparar Kona con garantías. Mi objetivo será el Mudial de Medio Ironman en octubre”, señaló Gómez Noya en un encuentro organizado por el Banco Santander en Madrid.

Además, el gallego valoró participar en “otras pruebas interesantes” como la prueba de Dallas de la Professional Triathletes Organisation y “otras carreras más cómodas y de perfil bajo a nivel nacional”. “No descarto acabar con un Ironman en noviembre. Mi objetivo era Kona pero me he visto obligado a cambiar mis objetivos”, insistió.

“Ha sido un año complicado, con muchos altibajos. Tuve COVID en mayo, el día antes de viajar a St. George, fue complicado y me dejó secuelas que tardé en recuperar. He tenido que entrenar más suave, pero ahora parece que ya está todo en su sitio”, relató el pentacampeón del mundo sobre la primera mitad de la temporada, marcada por el contagio de coronavirus en el mes de mayo, un día antes de competir en la prueba de Utah del Mundial.

La enfermedad llegó en el peor momento para el triatleta. “Lo que más rabia me dio del coronavirus es que me dio tiempo a preparar muy bien el Mundial de Ironman y ese trabajo no se vio reflejado, pero es hora de seguir adelante”, confesó Gómez Noya. “Es duro, es frustrante. Pero lo fue más cuando la recuperación, porque no fue tan rápida ni tan fácil como me hubiera gustado. Creo que me pilló con las defensas más bajas, igual por eso se cebó conmigo más de la cuenta”, añadió.