Por segunda vez en su carrera, el italiano Matteo Berrettini ganó el torneo de Stuttgart, el primero que consigue en lo que va de temporada, y que dejó con un sabor agridulce al británico Andy Murray que completó una semana estupenda a nivel competitivo, pero que se quedó sin el brillo del éxito.

El transalpino, décimo ahora del ránking ATP, demostró después de dos horas y media que es un jugador que se desempeña con soltura sobre hierba. Tumbó en tres sets (6-4, 5-7 y 6-3) a Murray, que terminó lastrado físicamente a pesar del auxilio del médico de pista al que recurrió en dos ocasiones en el tercer parcial.

No falló Berrettini en su primera presencia en una final en la temporada. El jugador romano acumula nueve victorias seguidas en Stuttgart que ganó también en el 2019. No conoce la derrota en este evento.

Ya lleva seis trofeos Berrettini, finalista de Wimbledon el pasado año, cuando ganó el torneo de Queens, el otro donde ha triunfado sobre hierba. Después de perderse la temporada de tierra por tener que tratarse de una lesión en la mano derecha en marzo pasado, tuvo un retorno al circuito alentador.

Ha acumulado horas de pista el italiano que apunta a Wimbledon, donde Murray ha ganado en dos ocasiones. Hace tiempo de aquello. Ahora, el británico, con una cadera de metal, pretender escalar puestos y volver a ser competitivo en un circuito que llegó a dominar.