El Liverpool ‘vuela’ en lo que puede ser la mejor temporada de su historia. Con la Copa de la Liga ya en sus vitrinas, el equipo inglés está clasificado para la final de la FA Cup, roza la de la Champions tras el 2-0 logrado en la ida de semifinales ante el Villarreal y marcha segundo en la Premier a un punto del Manchester City después de encadenar una racha de nueve victorias y un empate en los últimos diez encuentros. Lo hacen, además, imprimiendo un ritmo y un juego que apenas tiene réplica en el viejo continente y en el que destaca Thiago Alcántara. El centrocampista español ha dejado atrás su plástica forma de jugar para hacerse un futbolista mucho más completo que es capaz de gobernar el tempo de cada partido. Su evolución marca, en buena medida, la de este Liverpool, que en los últimos meses ha dado un paso (o dos) al frente.

Al igual que reconoció tras el duelo ante los castellonenses del pasado miércoles, al mayor de los Alcántara le ha tocado tirar de “paciencia” para hacerse un hueco en el club de Anfield. Su primera campaña fue difícil, sobre todo por una lesión de rodilla que le impidió jugar con los ‘reds’ hasta finales de diciembre. A partir de ahí se fue haciendo dueño del centro del campo de un equipo que poco o nada tenía que ver con el Barcelona y el Bayern que le habían tocado vivir en su carrera deportiva. De la pausa, la posesión y el toque a la velocidad, la verticalidad y, como dice Klopp, “el rock and roll”.

“Teníamos que tener paciencia. No es sólo tener paciencia, la clave también era encontrar esos huecos donde podíamos hacer daño. En la primera parte creamos muchas oportunidades y en la segunda también, hasta que llegaron los goles”, apuntó el internacional español tras la victoria ante el Villarreal. Un análisis de un partido que bien se puede extrapolar a su etapa en Liverpool. Paciencia es lo que ha tenido y ahora empieza a recoger sus frutos. “Disfruto mucho con las actuaciones del equipo. No me puedo quedar con un solo partido de mi carrera ni con una sola época porque las he disfrutado todas”, afirmó Alcántara, que recibió el premio a mejor jugador del partido.

Ahora pocos dudan de su importancia y su nivel, algo que no ocurrió hace poco más de un año. “Thiago es un lastre defensivo”, llegó a tuitear Jamie Carragher, leyenda ‘red’. Su primer y más firme defensor fue su actual técnico, que no dudó en atacar a aquellos que le señalaban. “Es sólo una percepción pública. Algo así como ‘Thiago está en el campo y nosotros ya no rendimos bien’. Este tipo de cosas son simplemente mierda, permitidme decirlo así”, comentó en una rueda de prensa Klopp.

Y es que Thiago es ahora un jugador mucho más completo que aquel que ya deslumbró en Barcelona y Munich. Principalmente porque ha pasado de ser un futbolista de filigranas y fantasía a uno que es capaz de dominar a su antojo el tiempo y el espacio de un partido sin perder su toque.