En una jornada internacional marcada por los duelos de rivalidad que ayer se vivían en casi todos los campeonatos, en Italia y Francia se saldaron condos igualadas.

El argentino Paulo Dybala regresó tras casi un mes de baja por lesión y rescató al Juventus en el denominado “derbi de Italia” contra el Inter de Milán, al anotar un penalti concedido tras control del VAR en el minuto 88.

Dybala, que no jugaba desde el pasado 27 de septiembre, cuando sufrió una lesión muscular en un partido contra el Sampdoria, saltó al campo en la reanudación en San Siro y transformó con seguridad, con un remate central, una pena máxima conseguida por el brasileño Álex Sandro por una falta del holandés Denzel Dumfries.

El equipo de Massimiliano Allegri, que llevaba cuatro victorias por 1-0 consecutivas, entre Serie A y Liga de Campeones, había recibido el 0-1 en el minuto 17, cuando el bosnio Edin Dzeko marcó a placer al rematar un balón suelto en el área tras un remate al larguero del turco Hakan Calhanoglu.

Mientras, en Francia el París Saint Germain sobrevivió en el estadio Velodrome (0-0) en el clásico francés ante el Olympique Marsella, que no tuvo la puntería necesaria para superar a un líder de la Ligue 1 que jugó casi toda la segunda parte con un hombre menos por la expulsión del marroquí Achraf Hakimi.